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Ver la versión completa : La vida nueva



VIDENTE.DADDY
01/10/2011, 15:11
LA VIDA NUEVALa conversión de una persona, comienza en tomar una decision, de vivir para con las promezas que sobre pasan esta vida, y esto es para siempre y por siempre. Porque ahora tenemos en quien refugiarnos, nuestro Salvador, Hijo de Dios. Claro está que la vida se puede reclamar siempre y cuando uno mismo la quiera, pero eso sería volver a cambiar la vida nueva por la antigua. Pero una vez que se reclama la vida antigua, el refugio que habíamos escogido para nuestras vidas, es muy difícil de volver lo a adquirir, primeramente porque todo esto ha costado precio de sangre. Ya sea que en la conversión hubo esa elección en requerir la vida nueva que se vive en Jesús, vuelve a tomar el mismo proceso el cuál es el arrepentimiento.En la conversión de la persona Dios derrama su poder, y lo maravilloso es que Dios comienza a trabajar con las personas individualmente así como también en muchos casos que Dios lo hace en unidad, con individuos que están dispuestos a hacer no solamente para ellos sino también para los demás. Los hijos de Dios reciben la vida nueva a través del Hijo de Dios, nuestro Señor Jesucristo cumple parte de esa promesa también en un sello que a través del Espíritu Santo, somos dignos de ser llamados a través del Espíritu Santo, hijos de Dios. Las tragedias que han surgido a través del tiempo y las edades otros le llamaríamos las dispensaciónes. Estas tragedias por ende han venido cambiando su manera de expresarlas, pero hasta donde hemos conocido es que todo lo que está fuera de la voluntad de Dios es pecado, así como también transgresión, otros tratamos de buscar la palabra adecuada para no hacer sentir mal a los demás, otra referencia que sería; la maldad, iniquidad, mentira y así sucesivamente podríamos seguir escalando hasta encontrar lo que se ha perdido. Todo lo que cohenciden con el despliegue de nuestros fracasos muchas veces provienen por las malas acciones, lo que nosotros le llamamos frutos y por lo que decidimos convertir lo dicho en un hecho. Porque del corazón habla la boca y la boca habla del corazón. Y nuestra salvación o condenación está a un pie de la letra. Muchas veces aquí es donde comienzan nuestros fracasos, en las decisiones y acciones que tomamos. Pero aún hay tiempo para el próximo paso. Amen.


VIDENTE.DADDY

VIDENTE.DADDY
01/10/2011, 16:08
LA RECONCILIACION Cuando se habla de la reconciliación, se habla de un tesoro y un misterio. Porque si eso es lo que produce el perdón, entonces podemos volver a nutrirnos para recibir las buenas dádivas de Dios conforme a su beneplácito poco a poco nos irá nutriendo ahora no solamente para convertirnos en hijos de Dios, sino más bien ciudadanos del reino de los cielos. Y para poder llegar a ingresar en ese reino divino, nuestro registro comienza aquí en la tierra. Porque la etapa de la transformación, Dios la ha guardado para el día de la redención. Dios puede cambiar la vida del hombre como un abrir y cerrar de ojos. Dios puede hacer crecer nuestra fe solamente en que creamos en él como el padre todopoderoso, Jehová de los ejércitos, el hijos de Dios Jesucristo y el Espíritu Santo. Llegar a creer en otra entidad fuera de esta. Primeramente seria una transgresión en todo lo que es Dios. Segundo lugar sería una difamación en contra todo su Ser. Y tercer lugar se convertiría en duda todos lo que se ha creído. Porque si nos ponemos a pensar qué es lo que Dios quiere en realidad, es que todos tengamos la misma hechura y su semejanza del mismo Dios creador que hizo los cielos y la tierra. Porque Dios no solamente está reconciliando al hombre de sus pecados, los cielos y la tierra y todo lo que hay en ella está registrada en el calendario de Dios. Estamos escritos en el libro de la vida. Allí es donde si se puede apreciar el misterio, porque sus elementos una vez reconciliarnos nada inmundo, ni contagioso, ni perverso. Sólo los que Dios ha propuesto a permitir y tener el privilegio de entrar al reino de los cielos reconciliando nos unos con Dios y otros con otros, porque en su forma parte de la bienaventuranza de poder ser llamados hijos Dios. Ahora los requisitos de la reconciliación sería una locura enumerar los, la única manera que podría enumerarse serían si los atributos de Dios se pudieran enumerar, entonces estaríamos en el derecho de formular una lista, pero nuestra mente no está capacitada para involucrarnos en ese despliege. Por lo menos yo, no lo haría, porque si estuviera enumerando los atributos de Dios, entonces le estoy poniendo límite a todos los que Dios ha sido, es y será por los siglos de dos siglos, eternamente y para siempre. Amén. Para entender un poco acerca de lo que estamos hablando. Y creo que es que lo único que podemos hacer, es glorificar a Dios y darle la gloria por todo lo que él es. Porque una cosa no pongo en duda, y es que Dios con las medidas y los detalles de sus atributos y su semejanza nos ha creado y eso es digno de admiración. Porque esos planos arquitectónicos, simétricos, usando calculadoras para medir el tiempo y la distancia solamente existen en la mente de Dios. Y sigo pensando que cada elemento que él escogió para crearnos era tan puro, que la tierra misma pudo haber sentido cada fragmento que se le escogido para crearnos. Hemos sido creados a toda perfección, con los mejores adornos adquiridos de la misma y, no solamente a perfección, sino más bien con la excelencia y perfecta creación de Dios, porque Dios nos ha hecho corona de la creación. Con toda su pureza, conocimiento y sabiduría de la cual ni aún ángel se le dio el dominio para sojuzgar la tierra. Pero ahora todo lo que recibimos del padre es a través del hijo, para que el hijos reciba la plenitud de la gracia y la adoración. Amen.
VIDENTE.DADDY

VIDENTE.DADDY
03/10/2011, 14:54
Las tragedias que conducen a la condenación
Es cierto que la vida del hombre está en todo su derecho, en vivir como le dé la gana. Con esto quiero decir que tienen la libertad que la podría tener cualquier cosa que contiene vida. Es verdad que hemos hablado de un tema muy amplio cuando nos referimos a la reconciliación. Porque estaríamos preguntándonos, por qué reconciliación si hay libertad. Porque la confusión viene, de reclamar el derecho que tenemos como individuales sobre nuestras decisiones y sobre lo que queremos adquirir. Muchas veces nosotros escogemos porque le obedecemos más a nuestros instintos y poco a poco nos vamos desafiando nosotros mismos en el error. Y nuestras excusas son; yo pensé que era así; lo creí de esta manera; creí que era posible;. Por tercera que siempre ti ya tenemos el problema encima, es que nos damos cuenta que ahora hay que buscarle una solución. Porque todo esto se manifiesta como un ataque a nuestra vida y no solamente a la corporal, por causa de enfermedades o también por el peligro de nuestro trabajo. Quién sabe si también por defensa propia. La cosa es que se hacen más grandes, que luego después veremos la vida confusa de las emociones, donde luego todo parece una pesadilla. Pero aquel párrafo, es para la persona que vive una vida a la ligera, porque todo aquel que aprende acerca de la libertad debe de reconocer que la libertad es más tiene sus parámetros para ser balanceado en la vida del libertinaje y esto aún siendo creyentes se nos hace difícil reconocerlo. Porque desde el momento que Dios creó al hombre, le dio la libertad de es***** a su manera. Cada decisión tomada por el hombre desde el uso de su razonamiento puede conducir a la tragedia de la reprención y esto solamente es el principio del conocimiento básico que le pertenece a la vida. En la cual Dios mismo se ha dispuesto a involucrarse íntimamente mostrando su amor para con cada uno de nosotros. Tendríamos que escribir otro libro para entrar en todos los detalles en cómo Dios domina toda su creación, porque tampoco no podemos salirnos de ese pensar. Somos creados por alguna causa y razón. Muchas veces la culpa nuestra se la echamos a otros. Otras veces preferimos esconder la maldad y pasamos años viviendo una doble vida que nos puede llevar hasta a la misma soledad. Y aquí es cuando debemos tener mucho cuidado, porque en un momento nos descuidamos de nosotros mismos y buscamos placeres del mundo, y luego nuestros cuerpos se ven involucrados como si estuviéramos en una guerra luchando con lo invisible. Amen.

VIDENTE.DADDY

VIDENTE.DADDY
03/10/2011, 23:42
La negligencia del hombre
Esta palabra hoy en día es muy común por la simple razón de ser asociada con los que cometemos errores cotidianos. Está asociada con el descuido, con la imperfección y sin pensarlo muchas veces con nuestra debilidad. Los errores son del ser humano, pero tampoco puede ser una excusa. Nadie está exento a ser tentado, lo importante es resistir la tentación que involucre el cambio de proceder a la perfección. A pesar que la vida está caracterizada como una experiencia más, nos preguntamos ¿Pero cuando sabemos que estamos equivocados? Las diferencias la hace el sumo conocimiento de la verdad. Hemos llegado a conocer que por falta de conocimiento uno perece a ser ondenado tampoco no podemos dejarlo ahí. Negligencia le falta el respeto aún al conocimiento a la sabiduría y entorpece la inteligencia. Podemos estructurar una agenda de compromisos asociados con responsabilidades sociales, familiares y personales y muchas veces le prestamos más atención a una más que a otra. Nos desequilibramos al pensar que vamos a lidiar con un problema antes que el otro. Aunque por ende toda agenda está sujeta a cambio. Porque como seres humanos nosotros solamente proponemos, pero Dios es el que dispone. Y nuestra relación con Dios está sujeta a cumplir la voluntad de Dios sobre todas las cosas. Y aquí es cuando más llegamos a ser negligentes. Porque muchas veces queremos un lujo de detalle con voz audible y presencia divina para dejarnos gobernar a través de su Santo Espíritu. Y Dios siempre obra de una manera muy multiforme y sorprendente. Para ello debemos de ser muy receptivos. La obediencia es la que perfecciona nuestra humildad y sencillez y nos convierte en personas benignas, llenas de salud, llenas de paz y gozo para actuar cuando nos sorprendan esas actitudes negligentes de comportamiento. Porque aún llevando una vida próspera como la madurez espiritual uno pierde el control cuando se encuentra a los desafíos que imprescindiblemente nos retan a mantener un carácter sólido de pureza y santidad. Llegar a juzgar una cosa o una persona sin analizar su propia defensa es un error que se viene cometiendo por muchos siglos.Pero bueno es hacer conciencia a tiempo, para no salirnos de nuestros cabales, porque nos ayuda a analizar con toda probabilidad y posibilidad disponible para sacarnos del error. Aquí es donde comienza la bienaventuranza en el peregrinaje de esta vida. Es muy importante estar asociados con la regla de oro. Cumplir con lo que Dios espera de nosotros y él hará el resto, llevar la paz con todos, cuidando aún el bienestar de los demás. Cumpliendo los mandamientos y los decretos que Dios nos ha dado a conocer para cuando se presenten pruebas adversas podamos recibir la corona de vida. Porque después de todo la justicia de Dios perfecciona toda las cosas en su debido orden No podemos cambiar los tiempos y las sazones que Dios ha puesto en su sola potestad. El es el que pone en nosotros el querer como el hacer. Lo único que nosotros debemos tener es un corazón presto y a la disposición para recibir toda la gracia de Dios. Tampoco podemos ignorar las artimañas del enemigo, de lo cual usa toda la astucia para confundir el entendimiento. La fe es un don de Dios que nos ayuda a contrarrestar toda oposición. La fe es el escudo para protegernos de todo dardo engañoso y malicioso. Por esta causa la Palabra viene a ser la autoridad suprema para reprender en el nombre del Señor Jesús toda mentira del diablo. El enemigo no respeta el tiempo ni las edades, mucho menos culturas y religiones. Así como conocemos a nuestros amigos, también debemos de conocer a nuestro enemigo. Y esto requiere un esfuerzo de nuestra parte. Es nuestra responsabilidad actuar con resistencia para que el enemigo cuando nos sorprenda, no nos pueda avergonzar, él es nuestro acusador, destructor y malhechor. Con todo esto, debemos de darle la oportunidad a Dios porque él es el que conoce lo mejor para cada uno de nosotros. Dios demanda de nosotros que sepamos la verdad para tener la libertad y así poder conocer nuestra propia persona para entender a los demás. Porque así como Dios quiere que conozcamos la caída también quiere que encontremos la salida. Nuestra concupiscencia nos limita a conocer con exactitud la esfera Espiritual. El diablo le tiene miedo a la oración, primeramente porque es una intercesión de respeto. Segundo, el pecado es un engaño que no nos permite ser libres, tercero, seguimos viviendo en costumbres y situaciones que parecen ser correctas, pero en realidad no son concretas. Hacernos responsables de nuestros propios actos nos ayuda a convencernos de nuestros errores. Esto no lo digo con exageración, pero puede darnos la seguridad de conocer el bien y el mal del cual sigue latiendo en nuestro ser, hasta que todo sea consumado a través de una redención. Usted y yo estamos necesitados de ser redimidos para obtener la calidad de perfección absoluta en un cuerpo glorificado. Y esto solamente se consigue a través del sacrificio vivo de nuestro Señor Jesucristo, y esto no es un secreto para nadie. Porque la salvación es para todos, porque sin remisión de sangre no hay perdón de pecados. Recordemos que perdonar es completamente olvidar y ahí es donde comienza nuestra victoria. Muchos hoy en día rechazamos esa salvación que Dios nos brinda a través de su Hijo amado. Porque creemos que necesitamos venir a los pies del Señor completamente limpios. Pero déjeme decirle amado lector, que Dios quiere recibirnos en la forma que usted y yo somos, para que poco a poco el vaya haciendo el cambio en nuestra vida, en nuestro andar, nuestro comportamiento y nuestras actitudes. No importando si usted tiene vicios, no importando sus deficiencias. Sea pobre o sea rico. Espero que cuando el Señor toque su corazón pueda abrirle, para que él pueda entrar y también pueda cenar con cada uno de nosotros. Porque el proveerá el pan de cada día. Espero en Dios que una de las primeras resoluciones de este nuevo año, pueda ser, aceptar al Señor nuestro Dios, con todo nuestro corazón, con toda nuestra mente, con toda nuestra alma, con todo nuestro espíritu y con todas nuestras fuerzas. Porque esto será parte del Nuevo Pacto de ser llamados hijos de Dios y nuevas criaturas en Cristo Jesús, Dios nuestro. Estas son las buenas nuevas del Evangelio que se deben predicar a tiempo y fuera de tiempo y en todo lugar. Amén.

VIDENTE.DADDY