RAFAEL SOTO
25/07/2011, 20:23
Tirados al viento dejas mis esperanzas
Herido con la espada aguda de las falacias de tu boca
Al soportar con impotencia la desfachatez de tu voluntad
Ser testigo del latrocinio de mi ingenuidad.
Corro entre la densa niebla de tu mente
Entre los marasmos de tus pensamientos indiferentes
Ilusionado como el sacristán al tocar su campana dominical
Quedó sepultado tal endiosado desdichado
En las profundidades de tu pasado.
Estoy desvanecido en los confines del universo de tu agenda
Como radicales libres fuera de tu ecuación
Soy rescatado por fotones de recuerdo cuando tienes oportunidades
Siendo expatriado rabioso de mis recelos.
Cristalino rio lleno de engaños tus sentimientos
Que me das a beber dulce del veneno de tu inquina
Hago desvaríos locos en mi mente
De un germen plantado que no vivió.
Herido con la espada aguda de las falacias de tu boca
Al soportar con impotencia la desfachatez de tu voluntad
Ser testigo del latrocinio de mi ingenuidad.
Corro entre la densa niebla de tu mente
Entre los marasmos de tus pensamientos indiferentes
Ilusionado como el sacristán al tocar su campana dominical
Quedó sepultado tal endiosado desdichado
En las profundidades de tu pasado.
Estoy desvanecido en los confines del universo de tu agenda
Como radicales libres fuera de tu ecuación
Soy rescatado por fotones de recuerdo cuando tienes oportunidades
Siendo expatriado rabioso de mis recelos.
Cristalino rio lleno de engaños tus sentimientos
Que me das a beber dulce del veneno de tu inquina
Hago desvaríos locos en mi mente
De un germen plantado que no vivió.