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Ver la versión completa : Recuerdos de mi adolescencia.



Jota E
23/08/2010, 19:00
Tengo todo arreglado, nos dijo el flaco Roberto, ustedes se vienen de noche a eso de las nueve a casa, pasamos la noche allí, y nos levantamos temprano para ir hasta la agencia de camiones que queda cerca de casa, ya arregle con un camionero amigo que va a Paysandú y nos llevara hasta allá sin problemas.

Así, que ese viernes previo a Semana de Turismo, Santa, o principalmente para nosotros, De la Cerveza, tomamos el ómnibus que nos llevaría desde Malvin hasta el Prado, donde vivía el flaco, junto a Fernando y a José, dispuestos a emprender el viaje hacia Paysandú y su semana de la Cerveza a la madrugada siguiente.

Pero claro, como dice el dicho uno propone y dios dispone, y en realidad, en este caso era la madre del flaco que estaba disponiendo que este, debido a su mala actuación liceal, no iría a ninguna parranda desde ese momento hasta que cumpliera la mayoría de edad.

Así que cuando estábamos llegando a la casa del susodicho, vimos que una mochila volaba por la ventana de una casa, y a continuación alguien saltaba siguiéndola. Que pasa flaco?, nada, nada, respondió, mi vieja no me quiso firmar el permiso de menor así que me rajo de todos modos, aclaremos, antes no era como ahora, treinta años atrás era casi seguro que la policía te detuviera, si estabas con pinta de adolescente, pelo largo y sin ningún mayor a la vista, tenias una mochila al hombro y no tenias el famoso “permiso de menor” expedido por la comisaría del barrio, pero flaco, y ahora donde dormimos?, pregunte yo, hubiese también preguntado si lo del camionero estaba arreglado, pero por temor a la respuesta me calle la boca.

Así, que luego de pasar una noche congelante en el Prado, a eso de las siete de la mañana arrancamos hacia la avenida Millan, para empezar a hacer dedo, ya que como nos temíamos, el viaje con el camionero amigo del flaco, por problemas que no vienen al caso, había quedado sin efecto.

Por supuesto que no era la primera vez, ni seria la ultima, que viajásemos a dedo, pero uno ya tenia las expectativas puestas en ese camión, así que el malhumor era palpable en el grupo. Si serás ********, primero nos haces dormir a la intemperie y ahora tenemos que hacer dedo, decía Fernando, bueno que queres que haga si se me complico la mano, contestaba el Flaco, y como todos sabíamos que si había un ser irresponsable en este mundo este era el Flaco, terminábamos por callarnos y hacer dedo, pues sabíamos que por mas que protestáramos, el otro no iba a cambiar mas su forma de ser.

Así que luego de horas y horas de hacer dedo y bajar y subir de diferentes vehículos llegamos cerca del anochecer a Paysandú. Era norma en nuestro grupo, el salir a la deriva, sin comida, sin dinero, solo con una mochila algo de ropa y el sobre de dormir. En esas épocas éramos jóvenes, alocados y nos sabíamos encantadores, así que nos resultaba realmente fácil sobrevivir día a día de la “caza y la pesca”.

No era la primer visita a la Semana de la Cerveza, ya habíamos estado anteriormente, y siempre nuestra forma de sobrevivir, era dormir en los campamentos municipales y, cuando la comida escaseaba, recorrer alguna casa que otra pidiendo algo con que llenar nuestros estómagos, actitud que hoy me daría vergüenza llevar adelante, pero en aquella época se ve que de vergüenza teníamos poco stock en nuestras mochilas.

Y fue en una de esas recorridas que llego a una casa, donde me recibe una mujer, que aunque bastante mayor que yo, demostraba una belleza natural y fresca.
Ella, ya con sus años encima, y soltera, vivía con un familiar en su casa, y quedaba por largos periodos de tiempo sola, ya que ese familiar por negocios viajaba constantemente.

Donde estas durmiendo?, me pregunto, y sin dejar que contestara agrego, aquí en casa tengo lugar en el garaje, porque no te quedas a dormir aquí?
Y a partir de ese día, disculpándome con mis amigos, mude las pocas cosas que me acompañaban, hacia el garaje de esta desconocida pero generosa dama.
Pasaron un par de días, de tarde yo pasaba con mis amigos recorriendo el festival y disfrutando la vida, y por las noches iba a cenar y dormir a la casa de mi nueva amiga.

Una noche luego de una juerga bastante pesada, llegue a la casa de Ella con más litros de cerveza que de sangre en mi organismo, por lo que pase una mala noche, y un peor despertar debido a la resaca. Ella se apiado un poco de la situación, y a la mañana estaba golpeándome la puerta de mi “habitación”, con un te en la mano, Ella se sentó a mi lado, y me dio el te que comencé a beber con placer. Y comencé a sentir, el tibio calor de la infusión llenando mi garganta, y la tibieza de su mirada en mi cara. Luego de algunos segundos en que su mirada se cruzo con la mía, segundos que me parecieron eternos, tomo mi cara entre sus manos, y me beso muy despacio y tiernamente los labios.

Yo no sabia como actuar, era demasiado joven y ella superaba en mucho mi edad, y esas sorpresas descolocaban mis ansiedades adolescentes aun. Ella me miro, dijo en voz alta, pero como para si misma “Pensar que podrías ser mi hijo”, me pidió disculpas por el beso y se retiro.

Esa noche, y luego de pasar la tarde con mis amigos, a los que no conté nada sobre mi experiencia, regrese a la casa de Ella, me estaba esperando con la cena pronta, y con una tristeza en su rostro que era palpable. “No debí haberte besado tesoro” me dijo mientras acariciaba mi cara, “sos demasiado joven, perdoname”. Dicho esto agrego, “Y creo que seria bueno que no te quedaras mas en casa”.
Aunque en ese momento no entendí la actitud de ella, muy a mi pesar tome mis cosas y me fui, rumbo al campamento a pasar la noche junto a mis amigos.

Nunca más supe nada sobre aquella dama, a la cual comprendí recién al ser yo mismo un adulto, pero tengo presente en mi corazón su ternura, su indecisión, y su miedo a la hora de besar mis labios adolescentes, hace tanto tiempo ya.

Caracolamarina
24/08/2010, 08:25
Jota E...Entrañable recuerdo, para tener en el arcón de vivencias inolvidables.
Lo que se vivió en la juventud, queda estampada en la mente, como fotos del albúm de la vida.
Saluditos cordiales y con los correspondientes y memoriosos recuerdos propios, que desatas..

Diana2005
24/08/2010, 15:03
Una noche luego de una juerga bastante pesada, llegue a la casa de Ella con más litros de cerveza que de sangre en mi organismo, por lo que pase una mala noche, y un peor despertar debido a la resaca. Ella se apiado un poco de la situación, y a la mañana estaba golpeándome la puerta de mi “habitación”, con un te en la mano, Ella se sentó a mi lado, y me dio el te que comencé a beber con placer. Y comencé a sentir, el tibio calor de la infusión llenando mi garganta, y la tibieza de su mirada en mi cara. Luego de algunos segundos en que su mirada se cruzo con la mía, segundos que me parecieron eternos, tomo mi cara entre sus manos, y me beso muy despacio y tiernamente los labios.

Yo no sabia como actuar, era demasiado joven y ella superaba en mucho mi edad, y esas sorpresas descolocaban mis ansiedades adolescentes aun. Ella me miro, dijo en voz alta, pero como para si misma “Pensar que podrías ser mi hijo”, me pidió disculpas por el beso y se retiro.


Lo tentativo que puede resultar en ocasiones, tanto para una mujer como para un hombre quedarse a solas (tengan la edad que tengan), cuando hay de por medio un lazo fuerte de afecto y de ternura.
Aunque en esta ocasión la sensatez preponderó en dicha dama.

¡Gracias por compartirnos tus recuerdos, Jotita!

Sadness
24/08/2010, 20:06
Mi admirado Jota, me arrobas, me llevas a lugares que en ocasiones me parecen conocidos y otros tantos extraños, pero siempre es un deleite leerte. ¡Vaya vivencia de adolescente! Reflexioné acerca del sentir de la mujer que brindo hospedaje al chaval y surgió una empatía con ella y me trajó a la memoria un episodio de mi vida, hace un par de años, cuando aun daba clases, había un chavalo que me intimidaba (Y mira que tengo un temperamento "pocas pulgas" y ese chico me intimido en verdad, su cercanía, sus palabras y ese velado acoso, que cuando estaba con sus compañeros se hacía más patente, no quise confrontarlo y hacer más grande el problema, sólo le ignoraba, lo bueno es que fue en el último año que ejercía la docencia y cambié de aires), de esa experiencia, posterior surgió este poema y comparó el sentir de esa mujer al tener cerca la bulliciosa juventud:



Oh, Nathan divino niño!
No sé que es más hermoso,
si el cielo o lo tierno de tu mirar,
engreído mozalbete, ansías devorar la vida.

Tímido cervatillo de espìritu indomable
y ante lo profundo de tu mirada, me rindo,
ignoras la vorágine de emociones al tenerte cerca,
afloran mis deseos al leve roce de tu piel.

¡Inocente perverso!
dulce tentaciòn, que ha gritos pide ser mío,
me obsequia con seductora sonrisa,
su boca,juega y provoca... fruta prohibida.

¡Demonio encarnado en ángel-niño!
no serè yo quien te enseña a amar,
esta vedada fértil tierra,
imposible dejar huella de origen en tu ser.

La Mar brama, se debate entre lo correcto y el instinto animal
Nathan, mío jamàs serás.
Brìndame tus alegrías, tristezas y enfados
que con eso me conformo yo
mi anhelado rosal en flor.

Besos con cariño.

Jota E
24/08/2010, 20:33
Jota E...Entrañable recuerdo, para tener en el arcón de vivencias inolvidables.
Lo que se vivió en la juventud, queda estampada en la mente, como fotos del albúm de la vida.
Saluditos cordiales y con los correspondientes y memoriosos recuerdos propios, que desatas..

Que habrá sido de aquella dama?, encontró su amor acaso?, a veces me pregunto eso, y recuerdo su miedo a despertar, al que dirán, el control que su hermano ejercía sobre ella, en fin...

Jota E
24/08/2010, 20:35
Lo tentativo que puede resultar en ocasiones, tanto para una mujer como para un hombre quedarse a solas (tengan la edad que tengan), cuando hay de por medio un lazo fuerte de afecto y de ternura.
Aunque en esta ocasión la sensatez preponderó en dicha dama.

¡Gracias por compartirnos tus recuerdos, Jotita!


Cosa extraña la mente humana, quizás, y sin quizás, si ella se hubiese animado a más, mi recuerdo no hubiera sobrevivido hasta hoy, pienso que su miedo, su deseo castrado, todo eso es lo que la ha hecho inolvidable para mi.

Jota E
24/08/2010, 20:36
Mi admirado Jota, me arrobas, me llevas a lugares que en ocasiones me parecen conocidos y otros tantos extraños, pero siempre es un deleite leerte. ¡Vaya vivencia de adolescente! Reflexioné acerca del sentir de la mujer que brindo hospedaje al chaval y surgió una empatía con ella y me trajó a la memoria un episodio de mi vida, hace un par de años, cuando aun daba clases, había un chavalo que me intimidaba (Y mira que tengo un temperamento "pocas pulgas" y ese chico me intimido en verdad, su cercanía, sus palabras y ese velado acoso, que cuando estaba con sus compañeros se hacía más patente, no quise confrontarlo y hacer más grande el problema, sólo le ignoraba, lo bueno es que fue en el último año que ejercía la docencia y cambié de aires), de esa experiencia, posterior surgió este poema y comparó el sentir de esa mujer al tener cerca la bulliciosa juventud:



Oh, Nathan divino niño!
No sé que es más hermoso,
si el cielo o lo tierno de tu mirar,
engreído mozalbete, ansías devorar la vida.

Tímido cervatillo de espìritu indomable
y ante lo profundo de tu mirada, me rindo,
ignoras la vorágine de emociones al tenerte cerca,
afloran mis deseos al leve roce de tu piel.

¡Inocente perverso!
dulce tentaciòn, que ha gritos pide ser mío,
me obsequia con seductora sonrisa,
su boca,juega y provoca... fruta prohibida.

¡Demonio encarnado en ángel-niño!
no serè yo quien te enseña a amar,
esta vedada fértil tierra,
imposible dejar huella de origen en tu ser.

La Mar brama, se debate entre lo correcto y el instinto animal
Nathan, mío jamàs serás.
Brìndame tus alegrías, tristezas y enfados
que con eso me conformo yo
mi anhelado rosal en flor.

Besos con cariño.

Uyyy que precioso poema Sad, que puro, que bello, y ahora sos vos la que me hacés rememorar sucesos pasados, con aquella profesora de historia en mi lejana adolescencia...

Caracolamarina
25/08/2010, 09:24
Jota E los leo a todos y cada uno de los comentarios...y me trae a la memoria (tu siempre nos traes a la memoria los recuerdos) porque compartimos ...Quizás ...quizás ...los mismos tiempos...en diferentes lugares pero los mismos en esencia.
La vida pasa muchas veces por los recuerdos y vidas que ya fueron, hechos, lugares, formas de comunicarse, y amar.
El amor y la juventud, que se ha ido, cuando se enfrentan de nuevo cara a cara, ambos en seres disímiles pero iguales...en su humanidad...Los años hacen que ...prime la cordura, y la atracción queda, para tener la idea de que todavía se puede ..de que todavía...la vida está en la plenitud...aunque no sea así.
Un maravilloso momento viviste..y mejor pentimento.
Pentimento...lo que está pintado debajo de la pintura, que vemos en el cuadro en el presente...