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Ver la versión completa : ¿ Cree Ud. que China es comunista ?



Pompilio Zigrino
11/10/2009, 20:37
Dr. Santos Mercado Reyes*

Tenía que verlo con mis propios ojos. Así que acepté la oferta de “viaje hoy y pague en doce meses sin intereses” y me fui a la República Popular de China. 18 días viajando de un lugar a otro, en avión, en tren, en barco o autobús a las ciudades, pueblos, centros comerciales, fábricas y museos.

La primera sorpresa que me llevé es que vi la fotografía de Mao Tse Tung, fundador del Partido Comunista, únicamente en dos instituciones públicas: en la Plaza de Tiananmen, en la capital de China, y en los billetes de todas las denominaciones. En ambas no aparece completo, sino solo la cara. No vi estatuas, ni aquellas pinturas famosas donde Mao aparecía rodeado del pueblo, han dejado de creer que los políticos son dioses, han enterrado el culto a la personalidad. Pero, qué ironía, la cara de Mao está en todos los billetes del Yuan Renminbi. Como sabemos, el dinero es el símbolo capitalista por excelencia pues representa la libertad del individuo, cosa que Mao trató de eliminar con su sistema socialista. Pues allí estaba, como recordándole a Mao, en su propia cara, que el capitalismo es el futuro de la humanidad y no el socialismo.

En Beijing, Xian, Chonqing, Shanghai, Suzhou y por supuesto, en Hong Kong se puede palpar y constatar lo que es crecer a dos dígitos. Rascacielos que nada le piden a New York, con arquitectura moderna, de 60 pisos o más y uno tras otro. Astilleros incontables a la orilla del río Yangtsé haciendo barcos de alto calado. No vi basura en las calles, ni grafitis en las paredes, barcos o tráileres. Los chinos, muy amables con los turistas, así estuviera atiborrado el autobús o el metro, nos cedían los asientos, no lo podía creer. Podíamos andar a los dos o tres de la mañana en las calles, restaurantes, bares o teatros sin el temor de asaltos. Y no porque hubiera un policía en cada esquina, es más, solo los vi guardianes y pocos en los museos o dirigiendo el tráfico. Nunca vi que detuvieran a un automovilista para infraccionarlo o algo parecido.

Todas las marcas de automóviles y especialmente las de mayor prestigio allí estaban rodando por las calles chinas. Los barcos en el Yangtsé parecían desfilar uno tras otro con una cantidad enorme de contenedores rumbo a los puertos de Shanghai o Hong Kong para embarcarse y llegar hasta el último rincón del mundo.

¡Que los chinos ganan poco! ¿Qué tienen, sueldos de miseria? Pues yo no lo vi. Comparando las vestimentas, los turistas parecíamos pordioseros, bueno no tanto, pero visten buenas marcas y sobre todo los jóvenes visten bien y otros muy bien.

Contaban los guías que este desarrollo es reciente, no más de treinta años. En 1949 Mao Dze Dong encabezando el Partido Comunista toma el poder. Eliminó a los capitalistas del campo y la ciudad y estableció el poder central del Partido. Todo lo que se hacía o deshacía en China debía ser obra o iniciativa del gobierno y especialmente de Mao. Quien no obedecía, no tenía derecho a comer. Socialismo puro.

A pico y pala construyeron grandes canales y presas, cultivaron arroz hasta en los cerros más abruptos, todo mundo tuvo vestido (verde oliva o azul mezclilla) y todos tuvieron su ración de arroz, una hazaña para esos tiempos. Pero la gente se cansó, las críticas al socialismo chino emergieron, los jóvenes querían mejor futuro y Mao lanzó la Revolución Cultural para “erradicar las ideas burguesas” y los resultados fueron peores. En 1976 muere Mao, el pueblo le echa una lagrimita, nunca se supo si de tristeza o felicidad, y lo colocan en un sarcófago transparente, bien cerrado, para que no fuera a salir de nuevo. Millones de chinos lo fueron a ver para asegurarse de que ya no estuviera vivo aquél que les quitó la libertad de elegir.

Pregunté a los jóvenes chinos su opinión de su viejo presidente comunista y todos me decían “Mao, hombre malo”, “Mao es historia”. Uno de ellos me dijo “Mao fue el último emperador de China”. Entonces quien es el bueno, les pregunté. Y la opinión fue invariable: El bueno es Deng Tsiao Ping, “el hombre que nos abrió el mundo”.

En efecto, en 1982 Deng, quien fuera enemigo de Mao dentro del Partido Comunista de China, pronunció una frase célebre: “ser rico no es malo”. Y fue la señal que detonó la revolución capitalista. Los chinos pudieron emprender negocios propios, se abrieron las fronteras al capital extranjero viniera de donde viniera (“no importa el color del gato, sino que cace ratones”, decía Deng), el gobierno se hizo a un lado para permitir el funcionamiento del mercado. Por cierto, no encontré estatuas ni fotos de Deng.

El Ejército Popular del Pueblo, que era el más grande del mundo, se redujo al 10% pues les dieron preferencia a los soldados para ir a trabajar a las fábricas capitalistas. A los campesinos se les permitió sembrar lo que quisieran, vender donde mejor les pagaran y usar las ganancias como mejor dispusieran, sin supervisión ni control del gobierno y el campo floreció y las ciudades dejaron atrás la escasez.

En 2004 se introdujo una inaudita reforma constitucional para garantizar el derecho a la propiedad privada. Ni el Estado, ni el Partido pueden violar el principio de propiedad privada. Es decir, no hay confiscaciones, nacionalizaciones, estatizaciones o algo parecido. Inaudito pues la propiedad privada es la base del sistema capitalista.

Según los chinos, en el año 2030 todos los chinos deben saber inglés o español, aparte de su lengua nativa. No van a imponer su idioma al mundo y a los niños ahora se les enseña a escribir con las letras del castellano, y solo hasta la secundaria aprenden los ideogramas del mandarín, pero sólo como cosa cultural. Es más, ya hay escuelas, desde primarias hasta universidades, donde todo se imparte en español o en inglés.

Mención especial merece saber que ya no hay “educación gratuita” en las universidades públicas. Si son universidades del gobierno los estudiantes pagan la mitad de lo que cobra una universidad privada. A los estudiantes sin recursos el gobierno les proporciona crédito que tendrán que pagar cuando salgan de las universidades. Es el primer país que entiende la maldad de la “educación gratuita”.

Por supuesto, a China le falta mucho para construir la mejor economía de mercado para que sirva de ejemplo al mundo: le falta privatizar todas las escuelas básicas y muchas empresas estatales; reducir los impuestos a las personas físicas al tres por ciento de su ingreso personal: eliminar los impuestos a las empresas; reducir el aparato de Estado para tener tres funcionarios por cada millón de de habitantes, pues en una verdadera economía neoliberal no hacen falta los parásitos estatales, pero si hacen falta filósofos y economistas de pensamiento austriaco que defiendan el sistema de mercado y no permitan que lleguen los izquierdistas “redentores” a asaltar el poder para volver a esclavizar al pueblo. También tienen que avanzar en la reforma financiera y monetaria para que el gobierno deje al sector privado la administración del dinero y se evite la tentación insana del señoreaje; finalmente les falta quitar todas las barreras para que China se convierta en un país cosmopolita abierto a todo ciudadano del mundo que quiera vivir en paz. Pero no dudo que lo logrará y más pronto de lo que imaginamos. “Aquí no queremos política, solo economía” me decían en Hong Kong. Por eso no se ven letreros de diputados, senadores, legisladores o gobernantes. ¿Quieres prosperar? allí está el mercado, ¡hazte millonario y todo el pueblo te tratará como un héroe de la nación!

Si México o cualquier país latinoamericano que todavía anda soñando con Marx y Keynes quiere descubrir el secreto de los chinos todo lo que tiene que saber es que allá si se están esforzando por aplicar neoliberalismo puro, es decir, economía de mercado o capitalismo, como guste llamarle. Ya se están publicando los libros de Friedrich von Hayek, Ludwig von Mises y Jesús Huerta de Soto.

¿Sigue usted pensando que China es comunista?, tome un vuelo y vea con sus propios ojos. *Profesor-investigador en la Universidad Autónoma Metropolitana. Unidad Azcapotzalco, Departamento de Ciencias Básicas. santos@teacher.com www.asuntoscapitales.com www.contrapeso.info

Emeric
25/10/2009, 11:08
En 1949 Mao Dze Dong encabezando el Partido Comunista toma el poder. Eliminó a los capitalistas del campo y la ciudad y estableció el poder central del Partido. Todo lo que se hacía o deshacía en China debía ser obra o iniciativa del gobierno y especialmente de Mao. Quien no obedecía, no tenía derecho a comer. Socialismo puro. Anoche vi un documental sobre la China de Mao, transmitido por ARTE (cadena cultural de televisión francoalemana), y dice que murieron de hambre unos 30.000.000 de chinos a causa de la mala gestión agrícola bajo el régimen maoísta. :yo:

Pompilio Zigrino
30/10/2009, 19:44
Casi siempre critico ese "pequeño detalle" de las decenas de millones de muertos ocasionados por los "socialistas", pero a la mayoría le parece un "detalle menor".......

Emeric
12/11/2009, 18:44
Casi siempre critico ese "pequeño detalle" de las decenas de millones de muertos ocasionados por los "socialistas", pero a la mayoría le parece un "detalle menor".......Sí, comparado con la población de China ...

ALBERTO RODRIGUEZ-SEDANO
13/11/2009, 07:56
Veo que hay quien sigue con su manipulación. Nunca dije que fuese un detalle menor; lo que sí hice fue crear un margen teórico para su posible crítica. Mi postura decía que la crítica a Marx por los muertos era causal, y no lógica; se culpaba a Marx, a la unidad psíquica que concibió para sus adentros su filosofía, de su influjo, como si culpan a Cristo del uso que otros hagan de sus ideas (pedófilos, hipócritas u otras formas que despiertan la sospecha moral). Tendría interés, sin embargo, en términos del influjo de las ideologías; el influjo social de ideas que causan colectivamente un mismo efecto ideológico es la raíz epistémica que estudia la sociología del conocimiento tal y como es defendida por mí; y serían falsas ideas propias ocultar la deuda lógica con Marx. Se podría discutir por qué los nazis hicieron lo que hicieron, o los comunistas; pero eso se ha planteado, hasta ahora, confundiendo la lógica de las ideas con el uso de ellas; se confunde su forma lógica con su discurso histórico y sociológico.

Repetidamente he hecho uso de ideas de otros, máxime para sodomizarlas; lo que distingue mi acción es que tiene un objeto del que no sólo dice verdad, bien y toda esa superchería.

Pompilio Zigrino
20/11/2009, 20:11
Sí, la humanidad está en deuda con Marx y también con Hitler, Stalin, Lenín, etc. Sin ellos no podríamos haber "avanzado" tanto.......

ALBERTO RODRIGUEZ-SEDANO
23/11/2009, 07:43
Es importante entender del concepto de deuda lo que tiene de condición psicológica, de histórica y de unidad lógica. Está claro que todos tenemos cierta adhesión por cada una de ellas, pero, en cuanto a la crítica, no conviene dejarse llevar mucho; la forma que aceptemos condiciona su posible discurso.

Es extraño que quien tanto ha presumido de falta en los otros no haga posible su propia reflexión y se precipite al encerramiento entre sus prejuicios; una cosa es la filosofía (1), y otra la ideología(2); una comprende a la otra, pero la otra no a la una; son dialécticas con su historia, una contiene su tiempo, y la otra lo formaliza. Una postura fuerte para la crítica presupone poder cuestionar la posición propia, la que se toma como condición inicial; la crítica va de una posición a otra analizando condiciones. Aunque parte de mi crítica inicial a Marx esté en un pensador tan influido por la ideología de la ciencia como Karl Popper, éste no iba por las esquinas lloriqueando. Cuando quiso atacar a Marx lo estudió desde un objeto criticable tal como el que hacía de sustento a la ideología de la que Marx se sirvió. Claro está, eso lo llevó a encontrar innegables méritos en Marx. Por otro lado, las ideas de Marx condujeron a terribles catástrofes humanitarias, pero conviene, no obstante, crear el margen posible margen para su diferencia: anteponer la condición teórica a su precipitación. Esto, como he mostrado repetidamente, hace una dialéctica con los objetos del tiempo, y su precipitación, lo que conlleva la identidad del tiempo con el discurso de su verdad, se hace desigual, no idéntica ni simétrica con ella sino distinta desde la amplitud de su diversidad; la verdad no discurre a solas sino batiéndose con los objetos en los que se crea una dialéctica. El significado primario, el que trasciende, no se encuentra en la primacía de las ideas de nadie ni en ningún símbolo que las represente. Popper admitió importantes méritos a Marx, aunque hay quien ha hecho propaganda con tramposos textos suyos, algo que ya denuncié en este mismo foro hace tiempo. Popper era antimarxista, eso es claro, pero las teorías de Popper defienden que la verdad no puede ser una condición final por sí misma que actúe simultáneamente en su verdad y en el discurso de su tiempo; la verdad está siempre limitada a la anomalía que crea su tiempo. El principio de la falsación no puede hacer primario el contenido teorético de su proposición porque en la identidad de su tiempo deshace la continuidad de su primacía al anticiparse a su desenlace. Lo que no era ciencia o era falso no entraba más en el debate, aunque fuese lo que más significaba. Y Popper mostró una reflexión muy débil en la trascendencia de la acción de significar. Significar es una acción irracional que no elimina su irracionalidad al racionalizarla; pretende, más bien, hacer el mismo su tiempo; y esa sociología institucional es una parte que se precipita como estructural, como un átomo que pretende ser el todo; se induce; se pretende que se significa igualmente en la diversidad de un tiempo. El análisis racional de la lógica situacional no estudia la condición anterior que determina su carácter de lógica; esta antinomia es la que muestra que su lógica es, más bien, histórica.

La estructura de la relación social no está verdaderamente determinada; es, en esencia, especulativa, y no es de extrañar que Marx sea el pensador más relevante para las teorías del cambio social. La lógica de la falsación, una lógica de la determinación negativa, por contraste de teorías, es insuficiente por sí misma al no orientar sus objetos más que a una verdad de la que sólo sabe por oposición; se presupone a sí misma constante, pero su constante, como el sintético (acción a priori de la verdad), es una repetición del marco para su posible concepción, de modo que su concepto es esencialmente repetitivo (un ejemplo muy claro está en lo que repite la prueba experimental). Su negatividad, como mostré, conduce lógicamente a una falta en su proposición, y, por ello, siempre reclama un discurso que precipita, un contraste que se sabe finalmente sólo formal. Cuando la presunción de la verdad se pretende por sí misma, en la identidad de su discurso, se queda siempre vacía y sin el objeto próximo a su tiempo que le de contenido.

A pesar de admirar las teorías de Marx y las de Popper no se las puede mirar demasiado sensiblemente. El nivel teorético revoluciona el sensible al crear un margen para su crítica en la ilusión de su anticipación.

Este tema no lo he abierto yo pero agradecería que si se hacen ironías con el "avance" se den pruebas, y no meras presunciones, de contar con una filosofía que avale lo sutil de ese sentido del humor. Lo que yo escribo hace bromas sobre lo que reflexiona porque siempre tiene un objeto de reflexión, pero no se ríe de lo que no se permite criticar. Estoy, claramente, en contra de cualquier filosofía del progreso por una cuestión lógica sobre su tiempo, porque precipita su bien. La filosofía de la historia en manos de Marx se hizo sociología del conocimiento, y a pesar de ser uno de sus máximos exponentes, no deja de ser una ideología que hace de su síntesis una identidad fuera de su tiempo. O sea, que los que critican a Marx hacen uso de su misma lógica.

PHILIPPEMOR
23/11/2009, 12:02
debemos hacer juicios para definir que China es comunista?? desde luego que no. China no es comunista, tiene una economia mixta.
todo lo que se dice sobre el comportamiento de los comunistas chinos, no tiene que ver con la pregunta que se hace en este foro¡¡

saludos cordiales,

Emeric
17/11/2011, 20:16
Anoche vi un documental sobre la China de Mao, transmitido por ARTE (cadena cultural de televisión francoalemana), y dice que murieron de hambre unos 30.000.000 de chinos a causa de la mala gestión agrícola bajo el régimen maoísta. :yo:Mediten en eso también, Pobla, Platón, Rebel ...