Lia

[prometeo8002]

Qué secreto atesora el amarillo,
qué se niega a decir el girasol,
o tal vez le llame girasuelo,
hoy la puerta se sorprendió entreabierta
remendando los cuidos con el polvo,
desde el viento contrariado en remolino.
Qué sorpresa de olores especiales,
de zapatos rondando sin sus dueños,
tal vez ahora les llame zapateños,
porque aquí ni los nombres en su sitio,
ni las migajas por su nombre de pan molido,
será este el lugar por donde ando.
Lia, que manera de liar la justa causa
y tamaña confusión de nombre y esqueleto,
si me andas por las piernas enredada
cual asalto de sorpresas convulsivas
y no se si plantar un beso o un regaño
en tu lomo canino salchichado.

[Sadness]

¡Qué envidia! Envidio la forma tan exquisita con que trabajas tus imágenes poéticas. Y envidio a Lia, porque ha sido sujeto de tu inspiración.