jorgesalaz
26/06/2008, 16:43
Los japoneses siempre han gustado del pescado fresco, pero las aguas cercanas a Japón no han tenido peces por décadas. Así que, para alimentar a la población japonesa, se fabricaron barcos pesqueros más grandes y potentes para poder ir mar adentro. Como el viaje redondo toma varios días, al llegar el pescado al mercado ya no estaba fresco. Pero a los japoneses no les gusta el sabor del pescado cuando no es fresco. Para resolver este problema, las compañías pesqueras instalaron congeladores en los barcos pesqueros. Los consumidores japoneses percibieron la diferencia y no les gustó el sabor de pescado congelado y en consecuencia se tenía que vender más barato. Entonces las compañías pesqueras instalaron tanques en los barcos pesqueros; así podían pescar peces, meterlos en los tanques y mantenerlos vivos hasta llegar a la costa de Japón. Pero se notó que muy pronto los peces dejaban de moverse en el tanque: estaban 'aburridos' y cansados, aunque vivos. Los consumidores también notaron la diferencia del sabor. Porque cuando los peces dejan de moverse pierden el sabor 'fresco-fresco'. Así tú. Tan pronto como alcanzas tus metas; empiezas una nueva empresa; pagas tus deudas; encuentras una pareja; o lo que sea, pierdes la pasión. Ya no necesitas esforzarte tanto, así que sólo te relajas. Experimentas el mismo problema que las personas que se ganan la lotería; o el de aquellas personas que heredan mucho dinero y que nunca maduran; o el de las personas que se quedan en casa y se hacen adictos a los medicamentos para la depresión o la ansiedad. Las personas prosperan más, extrañamente, cuando hay desafíos en su medio ambiente. Mientras más inteligente, persistente y competente seas, más disfrutas un buen problema. Si tus desafíos son del tamaño correcto, y así poco a poco vas conquistando esos desafíos, te emociona intentar nuevas soluciones. Igual es como los peces se mantienen vivos y mantienen su fresco sabor. Ahora las compañías pesqueras ponen a los peces dentro de los tanques en los botes pesqueros, pero ponen también... ¡un tiburón pequeño! Claro que el tiburón se come algunos peces, pero los demás llegan muy, pero muy 'vivos' ya que los peces son desafiados. Tienen que nadar durante todo el trayecto dentro del tanque para mantenerse vivos. Consejo: En lugar de evitar los desafíos, brinca hacia ellos y dales una paliza. Disfruta el juego. Si tus desafíos son muy grandes o son demasiados, nunca te rindas. El fracaso te cansará más. Mejor, reorganízate. Encuentra la determinación, la información, el conocimiento y la ayuda que requieras. Cuando alcances tus metas, proponte otras metas mayores. No obtengas el éxito sólo para luego acostarte sobre él. Invita un tiburón a tu tanque y descubre qué tan lejos puedes llegar realmente. La única persona que no se equivoca es la que nunca hace nada."