dragonfly
11/04/2008, 02:52
Momentos de tímidas miradas…
recopilando sensaciones…
atesorando verbos especiales…
descubriendo posibilidades…
deseando eternidad.
Pulcra unión en fundaciones de posibilidad
intentaron erguirse en el aire.
Grafías engalanaron música y poesía
hechas entre la divina locura de dos.
Miradas destellantes encendían los momentos
donde las palabras no se hacían necesarias.
Atesoré casi todo lo que trajiste a esto,
menos las palabras que me hacían sospechar…
hasta que me hiciste llorar.
Abracé las esperanzas que me diste y las hice mías
Y el corazón… amaneció vacío,
árbol sin raíces.
Ahora intentas llenarlo,
asustado ante el panorama de mi espalda.
Quiebras mi alma hoy…
si… porque la soledad te abruma.
Mañana… dirás no… cuando te des cuenta que soy simple
que no acumulo penas.
Te gustan las aguas revueltas…
a mi las claras…
te es necesario tener una excusa para sentirte asustado
yo no necesito excusas para estar segura.
Sólo pude mirarte…
sin decirte nada… sólo soltar tu mano
y alejarme con el no entiendo palpitando en mis ojos,
ese que una vez más deja mi cabeza moviendo de un lado a otro
y mi sentimiento parpadeando en cámara lenta…
ahogando la soledad entre garganta y almohada…
porque nunca encontrará respuesta,
sólo desertará ante dolor atrapado en pensamientos
y pluma divagando entre papel y letras.
©
recopilando sensaciones…
atesorando verbos especiales…
descubriendo posibilidades…
deseando eternidad.
Pulcra unión en fundaciones de posibilidad
intentaron erguirse en el aire.
Grafías engalanaron música y poesía
hechas entre la divina locura de dos.
Miradas destellantes encendían los momentos
donde las palabras no se hacían necesarias.
Atesoré casi todo lo que trajiste a esto,
menos las palabras que me hacían sospechar…
hasta que me hiciste llorar.
Abracé las esperanzas que me diste y las hice mías
Y el corazón… amaneció vacío,
árbol sin raíces.
Ahora intentas llenarlo,
asustado ante el panorama de mi espalda.
Quiebras mi alma hoy…
si… porque la soledad te abruma.
Mañana… dirás no… cuando te des cuenta que soy simple
que no acumulo penas.
Te gustan las aguas revueltas…
a mi las claras…
te es necesario tener una excusa para sentirte asustado
yo no necesito excusas para estar segura.
Sólo pude mirarte…
sin decirte nada… sólo soltar tu mano
y alejarme con el no entiendo palpitando en mis ojos,
ese que una vez más deja mi cabeza moviendo de un lado a otro
y mi sentimiento parpadeando en cámara lenta…
ahogando la soledad entre garganta y almohada…
porque nunca encontrará respuesta,
sólo desertará ante dolor atrapado en pensamientos
y pluma divagando entre papel y letras.
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