PDA

Ver la versión completa : Maestros y discípulos



Pompilio Zigrino
25/01/2008, 07:20
Tanto en ciencia, como en filosofía y religión, existen los innovadores y sus seguidores. Los primeros son los maestros y los segundos los discípulos. El progreso en el conocimiento se da generalmente cuando existe una buena transferencia de información desde el maestro hacia sus discípulos, permitiendo a éstos seguir las investigaciones en el punto en que aquéllos las dejaron, aunque pueden también surgir actitudes que impiden el progreso del conocimiento. La relación innovador-seguidor se da también a través de los libros, sin que haya un encuentro personal entre los protagonistas citados, porque a veces pertenecen a distintas épocas.

El seguimiento al maestro determinará distintas actitudes. Cuando la adhesión está exenta de críticas y de razonamientos, podrá caerse en el sometimiento intelectual o bien en el vulgar fanatismo. Estas actitudes pudieron observarse en los seguidores de Aristóteles, unos siglos atrás, cuando suponían que todo conocimiento posible estaba en sus libros. Al disponer de ese conocimiento, los propios discípulos se atribuían una privilegiada situación intelectual, cuando en realidad eran tan sólo oportunistas que poco se interesaban por la verdad. Por estos hechos, sin embargo, no debe culparse a Aristóteles, ya que fue un pensador y científico que hizo importantes aportes en varias ramas del conocimiento.

Esta actitud de sometimiento y de fanatismo se repite en muchos de los que adhieren a la Biblia y a otros libros sagrados. Suponen que toda la verdad está en ellos y desprecian el conocimiento que pueda provenir de otra parte. De la misma forma en que se someten intelectualmente, sin razonamiento ni vocación, pretenden someter a los demás. De ahí que no resulta extraño observar adolescentes que, al conocer de memoria gran parte de la Biblia, suponen estar en la cima del conocimiento y de la humanidad, mostrando parte de la severa crisis por la que atraviesa la religión.

Tanto el pseudointelectual como el fanático religioso se oponen al progreso del conocimiento. El ejemplo histórico lo tenemos en el caso del físico y astrónomo Galileo Galilei, quien tuvo que defenderse no sólo de los embates de los filósofos aristotélicos, sino también de la propia Iglesia Católica, ya que sus observaciones no concordaban con las creencias aceptadas en la época y, sobre todo, cuando no había ningún interés en conocer la verdad aportada por la naciente ciencia experimental. El sometido intelectualmente se caracteriza por su espíritu destructivo, ya que parece haber renunciado para siempre a realizar algún aporte personal, siendo el único medio que dispone para sentirse en una posición social privilegiada.

La filosofía cristiana surge como consecuencia de la adhesión de varios filósofos a su maestro. En unos casos se trató de compatibilizar la verdad revelada con la verdad filosófica, como ocurrió con la obra de Santo Tomás de Aquino respecto de Aristóteles. En otros casos se trató de filosofías “sometidas intelectualmente”, sabiéndose de antemano cuáles habrían de ser sus conclusiones. También hubo intentos por establecer fundamentos adicionales, incluso se hicieron propuestas sobre distintas interpretaciones de la religión, favoreciendo de esa forma el desarrollo de la filosofía.

Respecto de los resultados de los intentos por compatibilizar razón y fe, o filosofía y religión, surgieron opiniones como las siguientes:

1) Unos piensan que la asimilación supone la pérdida del mensaje original de Cristo, aplastado por el enorme peso de la filosofía griega.

2) Otros piensan que la filosofía medieval representa un intento legítimo de aclarar con las luces de la razón el misterio cristiano, fin para el que la filosofía griega sirvió de instrumento.

3) Para otros la filosofía cristiana es un pseudo-saber que, por un lado tergiversa la filosofía griega, y por otro lado fracasa en su intento de expresar la experiencia religiosa. (De http://acacia.pntic.mec.es)


Uno de los seguidores de Cristo, el filósofo y matemático Bernard Bolzano, propone como criterio de validez de la ética y de la religión, su efectividad en lograr los fines propuestos. Al respecto leemos:

“Una formulación algo más precisa de este principio utilitarista es ésta: Entre todas las acciones que te sean posibles, elige siempre aquella que, sopesadas todas las consecuencias, fomenten más la virtud y la felicidad del todo”.

“La religión más perfecta en sí es para Bolzano una religión «que incluya todas las doctrinas y opiniones que sean convenientes para el hombre en general, de tal manera que ninguna otra sería más conveniente»”.

“En pocas palabras: religión es el «conjunto de todas las verdades que son útiles para fomentar la virtud y la santidad» o un «conjunto de verdades que nos llevan a la virtud y a la santidad»” (De “Filosofía Cristiana” – Tomo I – Encuentro Ediciones)

Esta postura no resulta extraña en un matemático, incluso porque su maestro expresa un criterio de validez similar para toda propuesta ética, por cuanto dice “..por sus frutos los conoceréis”. Justamente, cuando uno quiere saber cuál es el grado de veracidad de una propuesta filosófica o religiosa, tendrá un indicio en los resultados que produce, algo que a veces no es tenido en cuenta.

La aceptación, o no, de nuestra parte, de una postura religiosa, o filosófica, teniendo en cuenta la influencia que produjo, nos lleva a formular hipótesis respecto de su contenido y de su veracidad. También podremos formular hipótesis respecto de la posible influencia que tendrán tales posturas a través del contenido observado. Luego, habrá que confirmar la hipótesis establecida en un principio. Esta es la manera de no someterse intelectualmente, aun cuando no podamos verificar del todo la suposición inicial.

Teniendo presente que Nietzsche y Marx fueron los autores de “filosofías” que originaron grandes catástrofes humanas, y que ambos se opusieron al cristianismo, degradándolo de diversas formas, no resulta extraño descubrir en tales ideologías un notable alejamiento de la realidad. Es por ello que, ante una lectura de los escritos de Nietzsche, se encontrará una obra literaria antes que filosófica, tal como siempre debió considerarse. Al respecto, Francisco Leocata escribió: “Durante varias décadas Nietzsche fue considerado más bien como un poeta, ejerciendo una poderosa influencia en el arte y en la literatura de los primeros años del siglo XX. Fueron los filósofos de la existencia, especialmente Jaspers y Heidegger, quienes reivindicaron su valor filosófico” (De “Del Iluminismo a nuestros días” – Ed. Don Bosco Argentina).

Cuando las ideologías dividen a la sociedad en sectores (amos y esclavos, burgueses y proletarios, creyentes e infieles, cristianos y paganos, etc.) y culpan a uno de esos sectores por los males padecidos por el otro, la violencia quedará establecida y garantizada. De ahí que la verdadera religión (según el criterio de Bolzano) es la que sugiere el aumento de la “virtud y la santidad” individual, y es la que se dirige a todos los hombres de la Tierra, y no a un sector en particular. Si no tiene ese carácter universal, no será una “religión”. Para Cristo hay justos y pecadores, y su mensaje está dirigido especialmente a éstos. No busca la división de los hombres, sino su unidad.

Uno de los seguidores de Cristo fue el paleontólogo y sacerdote Pierre Teilhard de Chardin. Así como Santo Tomás de Aquino se vio en la necesidad de compatibilizar religión y filosofía, Teilhard se vio en la necesidad de compatibilizar religión y ciencia, porque pertenecía a ambas y en ambas veía la verdad. Tal compatibilidad aparecería, no en un cambio en el cristianismo ni en un cambio en la ciencia, sino en una distinta interpretación del primero.

Mientras que la religión revelada se basa en la postura filosófica que supone la existencia de un Dios trascendente al mundo, que interviene durante el desarrollo de la humanidad, la ciencia se basa en la postura filosófica que parte de la existencia de leyes naturales invariantes, no previendo interrupciones ni cambio alguno en ellas. De ahí que la única posibilidad que queda, para unificar ciencia y religión, es interpretar al cristianismo (como a las otras religiones reveladas) como una religión natural, es decir, no revelada. No por ello dejará de tener validez ni efectividad, incluso para el hombre es más meritorio haber encontrado la verdad ética por sus propios medios que haberla recibido a través de una revelación.

Los errores, que se van acumulando y que impiden cualquier tipo de entendimiento entre ciencia, filosofía y religión, incluso internamente a esas actividades intelectuales, provienen generalmente del sometimiento intelectual de los que pretenden ocupar un lugar destacado en la sociedad, o de los que buscan que su pueblo ocupe un lugar preponderante entre los demás pueblos y naciones, antes que buscar el predominio de la verdad. Pareciera ser que un auténtico buscador de la verdad, que necesita de ella para poder compartirla con los demás, es algo muy poco frecuente entre los seres humanos.

El sometimiento intelectual entorpece el propio razonamiento y así la realidad deja de ser la referencia inmediata. Cuando no disponemos de una referencia común, el entendimiento es impracticable.

Emeric
07/03/2008, 07:09
la única posibilidad que queda, para unificar ciencia y religión, es interpretar al cristianismo (como a las otras religiones reveladas) como una religión natural, es decir, no revelada.Eso es imposible en la práctica, ya que los cristianos no querrán jamás negar el carácter de revelación divina de su religión.

Emeric
05/11/2011, 16:21
Uno de los seguidores de Cristo, el filósofo y matemático Bernard Bolzano, propone como criterio de validez de la ética y de la religión, su efectividad en lograr los fines propuestos. Al respecto leemos:

“Una formulación algo más precisa de este principio utilitarista es ésta: Entre todas las acciones que te sean posibles, elige siempre aquella que, sopesadas todas las consecuencias, fomenten más la virtud y la felicidad del todo”.

“La religión más perfecta en sí es para Bolzano una religión «que incluya todas las doctrinas y opiniones que sean convenientes para el hombre en general, de tal manera que ninguna otra sería más conveniente»”.
Eso es, sencillamente, la buena fe, y el sentido común.

Serg
06/11/2011, 17:01
No solo eso, sino que es el mas burdo utilitarismo de Mill, y positivismo de Comte, ambos en nada cristianos. Que torpeza la de utilizar esas frases de "seguidor de Cristo" para describir a hombres que a penas iban a la iglesia, estando ocupados con asuntos mas importantes como la logica o la matematica, y solo porque se dice que dijeron algun avez ser cristianos, se les cuenta como "fieles devotos". Que le hace pensar que Bolzano era un creyente devoto? Y si no piensa que lo fue, a que viene el describirlo como "seguidor de Cristo"? No es "seguidor" el que hace su voluntad? Si, a)no todos los que creen en la religion cristiana la practican, y b)solo los que la practican exageradamente al pie de la letra se deben llamar devotos o seguidores, se sigue que c)no todos los cristianos son "seguidores" de Cristo en el sentido de la devocion. Por lo que, o usted conoce datos biograficos de Bolzano que yo no conozco (que lo dudo), o utiliza la frase porque en el fondo lo que quiere es hacer propaganda de su irracional fe a costa de gente importante qu ejamas se expresaron con la conviccion insoportable con la que usted sobre su religion.

Emeric
09/11/2011, 07:47
No solo eso, sino que es el mas burdo utilitarismo de Mill, y positivismo de Comte, ambos en nada cristianos. Que torpeza la de utilizar esas frases de "seguidor de Cristo" para describir a hombres que a penas iban a la iglesia, estando ocupados con asuntos mas importantes como la logica o la matematica, y solo porque se dice que dijeron algun avez ser cristianos, se les cuenta como "fieles devotos". Que le hace pensar que Bolzano era un creyente devoto? Y si no piensa que lo fue, a que viene el describirlo como "seguidor de Cristo"? No es "seguidor" el que hace su voluntad? Si, a)no todos los que creen en la religion cristiana la practican, y b)solo los que la practican exageradamente al pie de la letra se deben llamar devotos o seguidores, se sigue que c)no todos los cristianos son "seguidores" de Cristo en el sentido de la devocion. Por lo que, o usted conoce datos biograficos de Bolzano que yo no conozco (que lo dudo), o utiliza la frase porque en el fondo lo que quiere es hacer propaganda de su irracional fe a costa de gente importante qu ejamas se expresaron con la conviccion insoportable con la que usted sobre su religion.A ver si Pompi le contesta, un día de éstos ...