idem
17/01/2008, 09:27
Te hundes sin saber cómo ni por qué...tienes razón, a veces, levantar cabeza se vuelve una misión imposible...pero no hay que dejar de intentarlo.
Y cansa, lo sé, lo vivo diariamente, pero con esfuerzo consigues que el cuello siga en su eje.
Piénsalo...sólo te pido eso.
Tú piénsalo, párate a pensar que por aquí no se está tan mal...y en lo afortunada que eres.
Despierta y disfruta del sol que amanece, y que no se cansa de salir, a pesar de hacerlo todos los días desde tiempos inmemoriales.
Disfruta de la lluvia, deja que te limpie, como limpia las aceras...
Disfruta de la gente que te regala una sonrisa, y de las nubes, y del olor de tu perfume favorito.
Disfruta de los hombros que se te ofrecen y apóyate en esos cimientos cuando vayas a caer.
Disfruta de la gente que conozcas hoy, y piensa en la que llegará mañana.
Mírate al espejo, y grítate el más grande te quiero jamás pronunciado (y si no sale, yo te lo grito).
Porque todos soñamos alguna vez con otra clase de vida. Porque a todos nos duelen las cosas que no tenemos, porque todos nos cansamos en algún momento de pelear.
Sólo así conseguirás mantener la cabeza en su sitio, haciendo recuento, cada día, de todas esas cosas que no tienen precio.
Besos;
Idem
Y cansa, lo sé, lo vivo diariamente, pero con esfuerzo consigues que el cuello siga en su eje.
Piénsalo...sólo te pido eso.
Tú piénsalo, párate a pensar que por aquí no se está tan mal...y en lo afortunada que eres.
Despierta y disfruta del sol que amanece, y que no se cansa de salir, a pesar de hacerlo todos los días desde tiempos inmemoriales.
Disfruta de la lluvia, deja que te limpie, como limpia las aceras...
Disfruta de la gente que te regala una sonrisa, y de las nubes, y del olor de tu perfume favorito.
Disfruta de los hombros que se te ofrecen y apóyate en esos cimientos cuando vayas a caer.
Disfruta de la gente que conozcas hoy, y piensa en la que llegará mañana.
Mírate al espejo, y grítate el más grande te quiero jamás pronunciado (y si no sale, yo te lo grito).
Porque todos soñamos alguna vez con otra clase de vida. Porque a todos nos duelen las cosas que no tenemos, porque todos nos cansamos en algún momento de pelear.
Sólo así conseguirás mantener la cabeza en su sitio, haciendo recuento, cada día, de todas esas cosas que no tienen precio.
Besos;
Idem