Oscar Javier
02/01/2008, 15:15
OBJECION
Gén. 6:6; Éxo. 32:14; Núm. 14:20; 1 Sam. 15:35; 2 Sam. 24:16 Dan a entende que Dios se arrepiente.
Mientras que Núm. 23:19-20; Isa. 15:29; San. 1:17 sostienen que Dios no se arrepiente.
¿No encierra esto contradicciòn?
COMENTARIO
No. Ambas afirmaciones no encierran ninguna contradicción, son totalmente ciertas teniendo en cuenta su contexto. Cada uno de esos versículos hay que entenderlos en su contexto y no deben sacarse de él. Haciendo un estudio cuidadoso de cada uno de ellos se puede ver que el hecho de que Dios "sienta pesar o no" depende de las circunstancias. Analicemos entonces estos versículos en sus respectivos contextos.
Circunstancias en las que Dios “se arrepiente”. Dios se arrepintió o sintió pesar cuando ciertas personas emprendieron un proceder incorrecto, como sucedió en los casos narrados en Gén. 6:6; Éxo. 32:14; Núm. 14:20; 1 Sam. 15:35. En el caso de 2 Sam. 24:16, Jehová sintió pesar de la calamidad que había traído sobre Israel por motivo del pecado de David. Esto se explica por el hecho de que él no se deleita ni siquiera en la muerte del inicuo (Eze 33:11.).
Circunstancias en las que Dios NO siente pesar o se arrepiente. Aunque haya casos en los que Dios siente pesar, hay otros en los que El NO se “arrepiente”. Por ejemplo, él es un Dios que no sentirá pesar respecto a su propósito en cuanto a la Tierra y la humanidad. El cumplimiento de todas las promesas de Dios es seguro, y el nunca se “echará para atrás” con el fin de no cumplirlas, sino que, por el contrario, a igual que en el pasado, las realizará todas sin falta. Esa es la idea que se trasmite en textos como Núm. 23:19-20; Isa. 15:29; San. 1:17.
EN CONCLUSION: HAY QUE TENER EN CUENTA EL CONTEXTO. Como se puede apreciar de estos y todos los otros ejemplos que aparecen en la Biblia, este sentimiento de pesar o arrepentimiento de parte de Jehová Dios obra de ambos modos, como muestra la Biblia. Si sus criaturas no cumplen el propósito que él tiene para ellas, siente pesar y ellas incurren en su ira. Pero si Jehová se propone castigar a algunas de sus criaturas debido a su proceder injusto, y ellas verdaderamente se sienten apesadumbradas, se arrepienten de sus pecados y no han llegado hasta el extremo de donde no se pueda volver, entonces Jehová tendrá un cambio de actitud mental para con ellas y les mostrará misericordia; sentirá pesar. Por eso en vez de darles aflicción o más aflicción les dará alivio.
En resumen, la idea de que Dios sienta pesar o se arrepienta o no, deben entenderse a la luz de su respectivo contexto, sin sacarlo de el y teniendo en cuenta el caso específico que se está relatando.
Gén. 6:6; Éxo. 32:14; Núm. 14:20; 1 Sam. 15:35; 2 Sam. 24:16 Dan a entende que Dios se arrepiente.
Mientras que Núm. 23:19-20; Isa. 15:29; San. 1:17 sostienen que Dios no se arrepiente.
¿No encierra esto contradicciòn?
COMENTARIO
No. Ambas afirmaciones no encierran ninguna contradicción, son totalmente ciertas teniendo en cuenta su contexto. Cada uno de esos versículos hay que entenderlos en su contexto y no deben sacarse de él. Haciendo un estudio cuidadoso de cada uno de ellos se puede ver que el hecho de que Dios "sienta pesar o no" depende de las circunstancias. Analicemos entonces estos versículos en sus respectivos contextos.
Circunstancias en las que Dios “se arrepiente”. Dios se arrepintió o sintió pesar cuando ciertas personas emprendieron un proceder incorrecto, como sucedió en los casos narrados en Gén. 6:6; Éxo. 32:14; Núm. 14:20; 1 Sam. 15:35. En el caso de 2 Sam. 24:16, Jehová sintió pesar de la calamidad que había traído sobre Israel por motivo del pecado de David. Esto se explica por el hecho de que él no se deleita ni siquiera en la muerte del inicuo (Eze 33:11.).
Circunstancias en las que Dios NO siente pesar o se arrepiente. Aunque haya casos en los que Dios siente pesar, hay otros en los que El NO se “arrepiente”. Por ejemplo, él es un Dios que no sentirá pesar respecto a su propósito en cuanto a la Tierra y la humanidad. El cumplimiento de todas las promesas de Dios es seguro, y el nunca se “echará para atrás” con el fin de no cumplirlas, sino que, por el contrario, a igual que en el pasado, las realizará todas sin falta. Esa es la idea que se trasmite en textos como Núm. 23:19-20; Isa. 15:29; San. 1:17.
EN CONCLUSION: HAY QUE TENER EN CUENTA EL CONTEXTO. Como se puede apreciar de estos y todos los otros ejemplos que aparecen en la Biblia, este sentimiento de pesar o arrepentimiento de parte de Jehová Dios obra de ambos modos, como muestra la Biblia. Si sus criaturas no cumplen el propósito que él tiene para ellas, siente pesar y ellas incurren en su ira. Pero si Jehová se propone castigar a algunas de sus criaturas debido a su proceder injusto, y ellas verdaderamente se sienten apesadumbradas, se arrepienten de sus pecados y no han llegado hasta el extremo de donde no se pueda volver, entonces Jehová tendrá un cambio de actitud mental para con ellas y les mostrará misericordia; sentirá pesar. Por eso en vez de darles aflicción o más aflicción les dará alivio.
En resumen, la idea de que Dios sienta pesar o se arrepienta o no, deben entenderse a la luz de su respectivo contexto, sin sacarlo de el y teniendo en cuenta el caso específico que se está relatando.