Alfeón
02/05/2007, 08:07
La Fotosíntesis nos muestra que el azar poco tiene que ver con la Evolución:
http://www.tendencias21.net/Confirman-que-la-fotosintesis-es-un-proceso-...
la llamada coherencia cuántica proporciona una extrema eficacia a la fotosíntesis, y que capacita al sistema para probar simultáneamente todas las posibilidades de conducción de energía potencial. De esta forma, el sistema elige la más eficiente de ellas en el proceso de convertir la energía solar en energía vital. Por Yaiza Martínez. Si ahora correlacionamos esto con la precisión de las constantes físicas más importantes. Pues, evolución al alzar 0, y evolución libre 2, no?.
Vamos a ver si logro centrar la discusión donde la sitúa el asunto de la fotosíntesis y la superposición; puesto que este dato crucial y asombroso no ha contado a la hora de contemplar la teoría de la evolución ni de la mente; y lo que no se puede hacer es obviarlo. Porque sería como pretender obviar la energía oscura a la hora de explicar porque se ha acelerado la expansión del universo en lugar de disminuirse.
1º
Si las plantas en consenso con la luz ya son capaces de mostrarnos que utilizan los estados de superposición para elegir como aprovechar mejor sus rutas energéticas, todavía más podrá hacerlo cualquier ser vivo sin que en ello medie el azar o la imposición del ambiente; eso es lo que es perfectamente extrapolable. Lo que nos está diciendo un proceso tan relativamente simple como el fotosintético y el de superposición, pero tan crucial; y eso que no es ni siquiera animal. Es que cualquier estado de superposición es capaz de elegir; luego responde a planteamiento y elección: planificación; de ahí que el desarrollo y complejificación de ese proceso cuando alcanza el reino animal, muestre una enorme inteligencia visceral, que es el resultado de la evolución no simplemente azarosa sino planificada, consensuada y ENSAYADA desde la fase vegetal fotosintética a la animal, etc. E incluso aun mucho antes, desde que las primeras constantes físicas fundamentales comenzaron a desplegar coherentemente por fases el puzzle.
2º
El incremento del tamaño del hipocampo en los pájaros cantores en época de celo y su vuelta a la normalidad pasada la época de celo, ilustra y demuestra, que el código genético puede adaptarse, mantener y eliminar cambios incluso mucho más profundos que una simple mutación aleatoria y todas las imposiciones a favor o en contra de distintas selecciones naturales ambientales... Y que por tanto la selección natural no explica nada determinante, es sólo un maquillaje que solo influye en aspectos secundarios(color de la piel negra, blanca pero a fin de cuentas...) al de la aparición de la inteligencia.
Luego algo tuvo que suceder para que se produjera la separación de póngidos y humanos, que posteriormente NO se ha vuelto a dar; ya que los pógidos siguen igual a pesar de los millones de años que sobre ellos lleva obrando la selección natural, ambientes, mutaciones, etc; luego ya ves que la selección natural no explica nada fundamental. Y en ese algo, la física nos sugiere tercamente que hay una planificación por medio de las constantes físicas más importantes que establece las reglas del juego astrofisico y evolutivo de la biosfera, como además hoy nos dice la fotosíntesis. Me equivoco?.
Como decía al principio, no es la planta la que elige, sino que se elige en la planta y en la luz. La planta tiene los receptores adecuados para que esa propiedad de superposición las dirija y exprese mediante las estructuras adecuadas o interfaces apropiado de la planta capaz de recepcionara y traducirlas, etc. Y EN LOS PONGIDOS OCURRE ALGO SIMILAR PERO MUCHO MÁS COMPLEJO MIENTRAS NO TIENEN UN SISTEMA NERVIOSO QUE LES PERMITA CONSCIENCIA PROPIA COMO A NOSOTROS EL NEOCORTEX. Por eso ni en el póngido ni en la planta hay voluntad propia; como dice el artículo de referencia: “De esta forma, el sistema elige la más eficiente de ellas en el proceso de convertir la energía solar en energía vital. Por Yaiza”. Esos estados pueden desechar o aceptar sopesada y consensuadamente.
En nosotros, esa dinámica fisiológica se expresa y traduce bien mediante el sistema reptiliano y el límbico; pero a diferencia de los póngidos tenemos un neocortex que consensua voluntariamente con esa dinámica fisiológica. Esa dinámica fisiológica está basada en la precisión de las constantes físicas más importantes que han hecho posible la evolución. Y baso mi apreciación en que precisamente la selección natural como está demostrado durante millones de años, que es incapaz de alterar significativamente el código genético de las especies puesto que permanecen constantes pese a todo.
El salto del sistema reptiliano y límbico de los pógidos hasta que se forma el neocortex no se produce por el mero pasar del tiempo y la presión de la selección natural. No sabemos que tiene que ocurrir para que eso suceda. Y tampoco sabemos que es lo que tiene que ocurrir para que cualquier otra especie animal se transforme en otra o al menos significativamente. Y lo que dicen todas las observaciones, es que no hay ni mutación ni selección capaz de cambiar una especie significativamente. No sabemos que es lo que permite la formación de una capa/neocortex de neuronas con sus electrones en estado de superposición consensuando con el vacío para desarrollar la complejidad del neocortex.Y no es una apreciación mía:
Un opúsculo publicado en 1999 por la Academia Nacional de Ciencias de los Estados Unidos describe los pinzones de Darwin como «un ejemplo particularmente convincente» del origen de las especies.
El opúsculo cita el trabajo de Gran y explica cómo «un solo año de sequía en las islas puede llevar a cambios evolutivos en los pinzones». Dicho opúsculo calcula también que «si se dan sequías alrededor de cada 10 años en las islas, podría surgir una nueva especie de pinzón en unos meros 200 años».
Pero este opúsculo silencia que los picos de los pinzones revirtieron a la normalidad después que volvieron las lluvias. No hubo una evolución neta. De hecho, hay diversas especies de pinzones que actualmente parecen estar mezclándose mediante hibridación, en lugar de divergiendo por selección natural tal como lo demanda la teoría de Darwin.
La supresión de la evidencia para dar la impresión de que los pinzones de Darwin confirman la teoría evolucionista bordea la mala práctica científica. Según el biólogo de Harvard Louis Guenin (escribiendo en Nature en 1999).
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Ni las mutaciones, ni el ambiente ni las circunstancias lamarkistas ni ninguna otra han sido capaces de justificar el salto del póngido al hombre; y eso después de millones de años. Los estados de superposición con su capacidad de autorregulación y elección se sobreponen a todo eso; pero como ocurre que los estados de superposición no están localizados sino que participan del vacío cuántico, sus decisiones y autorregulaciones están siempre consensuadas con la energía y dinámica del vacío(aquellas que conforman las constantes físicas más importantes para que aparezca y evoluciones la vida sin azar ni determinismo; como de modo similar (salvando las distancias) lo hacen la luz y la clorofila. Esa dinámica general es la que tuvo que ser la responsable del desarrollo del neocortex en un grupo de póngidos separándolos así de estos.
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La Ciencia da mucho de Sí...pero no la mayoría de los científicos, ¡claro!;
¿Será pues cierto? ¡ Que algunos humanos Sí provienen del mono?
http://www.tendencias21.net/Confirman-que-la-fotosintesis-es-un-proceso-...
la llamada coherencia cuántica proporciona una extrema eficacia a la fotosíntesis, y que capacita al sistema para probar simultáneamente todas las posibilidades de conducción de energía potencial. De esta forma, el sistema elige la más eficiente de ellas en el proceso de convertir la energía solar en energía vital. Por Yaiza Martínez. Si ahora correlacionamos esto con la precisión de las constantes físicas más importantes. Pues, evolución al alzar 0, y evolución libre 2, no?.
Vamos a ver si logro centrar la discusión donde la sitúa el asunto de la fotosíntesis y la superposición; puesto que este dato crucial y asombroso no ha contado a la hora de contemplar la teoría de la evolución ni de la mente; y lo que no se puede hacer es obviarlo. Porque sería como pretender obviar la energía oscura a la hora de explicar porque se ha acelerado la expansión del universo en lugar de disminuirse.
1º
Si las plantas en consenso con la luz ya son capaces de mostrarnos que utilizan los estados de superposición para elegir como aprovechar mejor sus rutas energéticas, todavía más podrá hacerlo cualquier ser vivo sin que en ello medie el azar o la imposición del ambiente; eso es lo que es perfectamente extrapolable. Lo que nos está diciendo un proceso tan relativamente simple como el fotosintético y el de superposición, pero tan crucial; y eso que no es ni siquiera animal. Es que cualquier estado de superposición es capaz de elegir; luego responde a planteamiento y elección: planificación; de ahí que el desarrollo y complejificación de ese proceso cuando alcanza el reino animal, muestre una enorme inteligencia visceral, que es el resultado de la evolución no simplemente azarosa sino planificada, consensuada y ENSAYADA desde la fase vegetal fotosintética a la animal, etc. E incluso aun mucho antes, desde que las primeras constantes físicas fundamentales comenzaron a desplegar coherentemente por fases el puzzle.
2º
El incremento del tamaño del hipocampo en los pájaros cantores en época de celo y su vuelta a la normalidad pasada la época de celo, ilustra y demuestra, que el código genético puede adaptarse, mantener y eliminar cambios incluso mucho más profundos que una simple mutación aleatoria y todas las imposiciones a favor o en contra de distintas selecciones naturales ambientales... Y que por tanto la selección natural no explica nada determinante, es sólo un maquillaje que solo influye en aspectos secundarios(color de la piel negra, blanca pero a fin de cuentas...) al de la aparición de la inteligencia.
Luego algo tuvo que suceder para que se produjera la separación de póngidos y humanos, que posteriormente NO se ha vuelto a dar; ya que los pógidos siguen igual a pesar de los millones de años que sobre ellos lleva obrando la selección natural, ambientes, mutaciones, etc; luego ya ves que la selección natural no explica nada fundamental. Y en ese algo, la física nos sugiere tercamente que hay una planificación por medio de las constantes físicas más importantes que establece las reglas del juego astrofisico y evolutivo de la biosfera, como además hoy nos dice la fotosíntesis. Me equivoco?.
Como decía al principio, no es la planta la que elige, sino que se elige en la planta y en la luz. La planta tiene los receptores adecuados para que esa propiedad de superposición las dirija y exprese mediante las estructuras adecuadas o interfaces apropiado de la planta capaz de recepcionara y traducirlas, etc. Y EN LOS PONGIDOS OCURRE ALGO SIMILAR PERO MUCHO MÁS COMPLEJO MIENTRAS NO TIENEN UN SISTEMA NERVIOSO QUE LES PERMITA CONSCIENCIA PROPIA COMO A NOSOTROS EL NEOCORTEX. Por eso ni en el póngido ni en la planta hay voluntad propia; como dice el artículo de referencia: “De esta forma, el sistema elige la más eficiente de ellas en el proceso de convertir la energía solar en energía vital. Por Yaiza”. Esos estados pueden desechar o aceptar sopesada y consensuadamente.
En nosotros, esa dinámica fisiológica se expresa y traduce bien mediante el sistema reptiliano y el límbico; pero a diferencia de los póngidos tenemos un neocortex que consensua voluntariamente con esa dinámica fisiológica. Esa dinámica fisiológica está basada en la precisión de las constantes físicas más importantes que han hecho posible la evolución. Y baso mi apreciación en que precisamente la selección natural como está demostrado durante millones de años, que es incapaz de alterar significativamente el código genético de las especies puesto que permanecen constantes pese a todo.
El salto del sistema reptiliano y límbico de los pógidos hasta que se forma el neocortex no se produce por el mero pasar del tiempo y la presión de la selección natural. No sabemos que tiene que ocurrir para que eso suceda. Y tampoco sabemos que es lo que tiene que ocurrir para que cualquier otra especie animal se transforme en otra o al menos significativamente. Y lo que dicen todas las observaciones, es que no hay ni mutación ni selección capaz de cambiar una especie significativamente. No sabemos que es lo que permite la formación de una capa/neocortex de neuronas con sus electrones en estado de superposición consensuando con el vacío para desarrollar la complejidad del neocortex.Y no es una apreciación mía:
Un opúsculo publicado en 1999 por la Academia Nacional de Ciencias de los Estados Unidos describe los pinzones de Darwin como «un ejemplo particularmente convincente» del origen de las especies.
El opúsculo cita el trabajo de Gran y explica cómo «un solo año de sequía en las islas puede llevar a cambios evolutivos en los pinzones». Dicho opúsculo calcula también que «si se dan sequías alrededor de cada 10 años en las islas, podría surgir una nueva especie de pinzón en unos meros 200 años».
Pero este opúsculo silencia que los picos de los pinzones revirtieron a la normalidad después que volvieron las lluvias. No hubo una evolución neta. De hecho, hay diversas especies de pinzones que actualmente parecen estar mezclándose mediante hibridación, en lugar de divergiendo por selección natural tal como lo demanda la teoría de Darwin.
La supresión de la evidencia para dar la impresión de que los pinzones de Darwin confirman la teoría evolucionista bordea la mala práctica científica. Según el biólogo de Harvard Louis Guenin (escribiendo en Nature en 1999).
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Ni las mutaciones, ni el ambiente ni las circunstancias lamarkistas ni ninguna otra han sido capaces de justificar el salto del póngido al hombre; y eso después de millones de años. Los estados de superposición con su capacidad de autorregulación y elección se sobreponen a todo eso; pero como ocurre que los estados de superposición no están localizados sino que participan del vacío cuántico, sus decisiones y autorregulaciones están siempre consensuadas con la energía y dinámica del vacío(aquellas que conforman las constantes físicas más importantes para que aparezca y evoluciones la vida sin azar ni determinismo; como de modo similar (salvando las distancias) lo hacen la luz y la clorofila. Esa dinámica general es la que tuvo que ser la responsable del desarrollo del neocortex en un grupo de póngidos separándolos así de estos.
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La Ciencia da mucho de Sí...pero no la mayoría de los científicos, ¡claro!;
¿Será pues cierto? ¡ Que algunos humanos Sí provienen del mono?