karlacris
30/04/2007, 16:31
Me enseñaron valores que han hecho que mi vida sea plena, sea placentera…
A veces el permanecer fiel a esos valores me hace sentir como un Quijote, sola peleando contra molinos de viento, contra aquello en lo cual yo no creo ni comparto…
Y aunque a veces los dardos de los encantamientos han podido penetrar mi armadura, no me detengo porque sé que he sido llamada a ser diferente, a no conformarme a la mentalidad engañosa de fuera.
Algunas veces pareciera que de las heridas infligidas en la batalla no me recuperaré y que harán que me convierta otra vez en “Alonso Quijano”, sin esa visión superior, pero al estar en tierra reflexiono que mi vida vale más con esos valores por los cuales doy mi vida que sin ellos… volteo a ver y veo a mis Sanchos Panzas, aquellos que me ayudan a ponerme en pie, que creen en mi, que me estiman precisamente por esa “locura” que tiene mi corazón… Y a medida me levanto veo que hay otros Quijotes en este mundo, que no sólo yo veo gigantes en los molinos de vientos… que hay otros que han emprendido la cruzada en busca de restaurar esos valores que tanto sentido le dan a mi vida.
Y sigo siendo esa Quijota idealista, que cree en la nobleza de los corazones, en la lealtad de las amistades, en el no hacer daño…
Y lo sigo siendo porque mi corazón se resiste a ser frívolo y utilitarista, porque no importa cuantas veces esté en el campo de batalla herida siempre habrá alguien a mi alrededor que me recuerde que todos somos llamados a ser Quijotes…
A veces el permanecer fiel a esos valores me hace sentir como un Quijote, sola peleando contra molinos de viento, contra aquello en lo cual yo no creo ni comparto…
Y aunque a veces los dardos de los encantamientos han podido penetrar mi armadura, no me detengo porque sé que he sido llamada a ser diferente, a no conformarme a la mentalidad engañosa de fuera.
Algunas veces pareciera que de las heridas infligidas en la batalla no me recuperaré y que harán que me convierta otra vez en “Alonso Quijano”, sin esa visión superior, pero al estar en tierra reflexiono que mi vida vale más con esos valores por los cuales doy mi vida que sin ellos… volteo a ver y veo a mis Sanchos Panzas, aquellos que me ayudan a ponerme en pie, que creen en mi, que me estiman precisamente por esa “locura” que tiene mi corazón… Y a medida me levanto veo que hay otros Quijotes en este mundo, que no sólo yo veo gigantes en los molinos de vientos… que hay otros que han emprendido la cruzada en busca de restaurar esos valores que tanto sentido le dan a mi vida.
Y sigo siendo esa Quijota idealista, que cree en la nobleza de los corazones, en la lealtad de las amistades, en el no hacer daño…
Y lo sigo siendo porque mi corazón se resiste a ser frívolo y utilitarista, porque no importa cuantas veces esté en el campo de batalla herida siempre habrá alguien a mi alrededor que me recuerde que todos somos llamados a ser Quijotes…