jorgesalaz
26/04/2007, 09:58
Mirador
Armando Fuentes Aguirre
Me habría gustado conocer a Thurgood Marshall, primer magistrado de origen africano que tuvo la Suprema Corte de los Estados Unidos.
Cierta mañana de domingo estaba en su bella residencia de un elegante suburbio en la ciudad de Washington, podando el pasto del jardín. Una dama que pasaba en su automóvil se detuvo y le gritó: —Buen hombre: ¿cuánto cobra por cortar el césped? Aquello pescó desprevenido al magistrado. No supo qué contestar.
—¿Cuánto le paga la dueña de esta casa? —repitió su pregunta la mujer.
Entonces sí Marshall respondió: —No me paga nada, señora, pero me permite acostarme con ella.
Me habría gustado conocer a Thurgood Marshall. No sólo era humilde: también era ingenioso...
Armando Fuentes Aguirre
Me habría gustado conocer a Thurgood Marshall, primer magistrado de origen africano que tuvo la Suprema Corte de los Estados Unidos.
Cierta mañana de domingo estaba en su bella residencia de un elegante suburbio en la ciudad de Washington, podando el pasto del jardín. Una dama que pasaba en su automóvil se detuvo y le gritó: —Buen hombre: ¿cuánto cobra por cortar el césped? Aquello pescó desprevenido al magistrado. No supo qué contestar.
—¿Cuánto le paga la dueña de esta casa? —repitió su pregunta la mujer.
Entonces sí Marshall respondió: —No me paga nada, señora, pero me permite acostarme con ella.
Me habría gustado conocer a Thurgood Marshall. No sólo era humilde: también era ingenioso...