Santiago bolso
26/01/2007, 10:45
No sé si todo tiempo pasado fué mejor, ese no es el asunto, el tema es que me gusta recordar a futbolistas que me impactaron, un homenaje a los olvidados y a los no tanto.
Primero algunos uruguayos desconocidos para la mayoría, Progreso del 86 87 con Pedro Pedrucci, número diez zurdo de los buenos, arriba Yoni Mikeiro y Próspero Silva, dos punteros que hacían las delicias de su hinchada y desquicios en la defensa rival. De Defensor campeón, no recuerdo el año, Gerardo Miranda, número diez atípico, derecho, pero de una calidad que yo quería imitar cuando en mi adolescencia soñaba con ser futbolista profesional, acompañado en la delantera con un conocido, el "manteca" Martínez.
Ahora tres argentinos de cuando yo veía el programa que emitían acá en Uruguay en diferido, Medina Bello de River, excelente jugador, me encantaba, cuando la agarraba siempre parecía que venía el gol. De Boca, Comas, a ver si algún memorioso se acuerda de este zurdo que pateaba muy bien y tenía velocidad y habilidad. Por último, de Boca también, Soñora, era un buen lateral, pero a mí lo que más me impresionaba era el nombre, me parecía que hacía musical el relato.
Para los que quieran recordar, chau.
Primero algunos uruguayos desconocidos para la mayoría, Progreso del 86 87 con Pedro Pedrucci, número diez zurdo de los buenos, arriba Yoni Mikeiro y Próspero Silva, dos punteros que hacían las delicias de su hinchada y desquicios en la defensa rival. De Defensor campeón, no recuerdo el año, Gerardo Miranda, número diez atípico, derecho, pero de una calidad que yo quería imitar cuando en mi adolescencia soñaba con ser futbolista profesional, acompañado en la delantera con un conocido, el "manteca" Martínez.
Ahora tres argentinos de cuando yo veía el programa que emitían acá en Uruguay en diferido, Medina Bello de River, excelente jugador, me encantaba, cuando la agarraba siempre parecía que venía el gol. De Boca, Comas, a ver si algún memorioso se acuerda de este zurdo que pateaba muy bien y tenía velocidad y habilidad. Por último, de Boca también, Soñora, era un buen lateral, pero a mí lo que más me impresionaba era el nombre, me parecía que hacía musical el relato.
Para los que quieran recordar, chau.