ALBERTO RODRIGUEZ-SEDANO
24/01/2007, 09:36
Hay una frase célebre que dice que nuestro problema es que no aprendemos de la historia. La oigo en conversaciones y recientemente la he leído en uno de estos foros.
La historia como una y proceso universal es una debilidad de Herder, Kant y Hegel, junto a otros filósofos y público en general. Sencillamente es la buena intención de actualizar el conocimiento histórico como sometido a las mismas leyes que el de la física. Que no se hable de causalidad y se ponga otros nombres no añade mérito alguno. Como he dicho varias veces, el problema no es de la historia, sino de nuestro conocimiento de ella. Lamentablemente este error no se quedó ahí, sino que se habló de necesidad histórica o de irremisibilidadad. Esta teoría avalada por una optimista fe en el progreso, ha dado lugar a teorías asentadas en el mundo del conocimiento: economía, filosofía, ciencia. ….
No aprendemos de la historia porque no hay nada que aprender. La historia como teoría nos puede enseñar cosas: algo distinto de que las podamos aprender. La referencia implícita es un sentido de la historia, teoría ideológica y acientífica. Sobre este tema exactamente escribí mi “Schopenhauer y la historia”, en este mismo foro. A su vez escribí “La lógica de Weber” que es lo mismo que “La lógica situacional”. No creo que estén muy claras las posibilidades que daría una “teoría científica de la historia”, más bien creo sería algo peligroso para el hombre; sí creo que podemos conocer una Lógica histórica, o de los acontecimientos, pero insisto en que no sé para qué la querríamos, además de para cambiarla, en el sentido del tema de aprender de la historia.
En mis temas sobre moral, en este foro, he pretendido tomar una posición distante políticamente, dejando para el despacho mis inclinaciones, tal y como aprendí de Weber y Durkheim. De nuevo volvemos a los paralelismos no determinados entre el mundo ético, fenomenología de la ética, y el mundo de las teorías.
La historia como una y proceso universal es una debilidad de Herder, Kant y Hegel, junto a otros filósofos y público en general. Sencillamente es la buena intención de actualizar el conocimiento histórico como sometido a las mismas leyes que el de la física. Que no se hable de causalidad y se ponga otros nombres no añade mérito alguno. Como he dicho varias veces, el problema no es de la historia, sino de nuestro conocimiento de ella. Lamentablemente este error no se quedó ahí, sino que se habló de necesidad histórica o de irremisibilidadad. Esta teoría avalada por una optimista fe en el progreso, ha dado lugar a teorías asentadas en el mundo del conocimiento: economía, filosofía, ciencia. ….
No aprendemos de la historia porque no hay nada que aprender. La historia como teoría nos puede enseñar cosas: algo distinto de que las podamos aprender. La referencia implícita es un sentido de la historia, teoría ideológica y acientífica. Sobre este tema exactamente escribí mi “Schopenhauer y la historia”, en este mismo foro. A su vez escribí “La lógica de Weber” que es lo mismo que “La lógica situacional”. No creo que estén muy claras las posibilidades que daría una “teoría científica de la historia”, más bien creo sería algo peligroso para el hombre; sí creo que podemos conocer una Lógica histórica, o de los acontecimientos, pero insisto en que no sé para qué la querríamos, además de para cambiarla, en el sentido del tema de aprender de la historia.
En mis temas sobre moral, en este foro, he pretendido tomar una posición distante políticamente, dejando para el despacho mis inclinaciones, tal y como aprendí de Weber y Durkheim. De nuevo volvemos a los paralelismos no determinados entre el mundo ético, fenomenología de la ética, y el mundo de las teorías.