PDA

Ver la versión completa : Represión del sentimiento religioso



Pompilio Zigrino
30/07/2006, 11:29
Supongamos tener en nuestras manos la legislación que rige la relación laboral entre empleador y empleado. El conjunto de leyes y reglamentos mencionado es algo concreto y evidente, si bien requiere de una interpretación adecuada.

Luego de interpretarla, podemos describirla como el resultado de una finalidad objetiva que orientó a sus realizadores. Este es el “espíritu de la ley”, que vendría a ser una intención, una finalidad o una voluntad de realización. Tal finalidad puede ser, por ejemplo, beneficiar al empleado, o al empleador, o a ambas partes equitativamente. Así, ante casos dudosos, no contemplados explícitamente, un juez habrá de guiarse por la aparente finalidad de la ley laboral.

Si buscamos otro conjunto de leyes, tal el caso de las leyes naturales, también podremos hablar del “espíritu de la ley natural”; de su finalidad aparente, de su objetivo, de la voluntad de un Creador. Si bien la realidad última, que tratamos de conocer, es la propia ley natural, al interpretar su espíritu, surge la figura de un ente Creador al cual nos referimos como si fuese un hombre con capacidad de decisión y con una personalidad definida. Incluso identificamos tal Creador, o Dios, como el autor de la ley natural, por ser una forma cómoda de describir. Esta es la esencia de la religión natural.

Si bien la religión ha ido perdiendo adeptos a medida que transcurre el tiempo, hay quienes afirman que, en realidad, el hombre sólo ha reprimido su actitud religiosa, la cual aparece en formas bastante complejas. Paul Tournier escribió:

“Se llega a la neurosis cuando se reprimió algo sin haberlo eliminado. El hombre moderno cree haber eliminado el mundo de los valores, de la poesía, de la conciencia moral, pero no ha hecho más que reprimirlo y sufre por esto”.

“La evolución de la sociedad a partir del Renacimiento destruyó los tradicionales marcos de referencia, y el hombre en la actualidad está perdido, tambaleando entre las doctrinas más contradictorias. El mundo le sugiere que el sentimiento, la fe, la verdad filosófica carecen de importancia. Pero este hombre conserva en el fondo de su corazón la justa intuición de que estos problemas son los importantes. No habla de su sed de amor, de su soledad moral, de su angustia respecto de la muerte, del misterio del mal o el misterio de Dios; reprime estos problemas, pero le obsesionan. Stocker dio esta definición de la neurosis: un conflicto interior entre una sugestión falsa y una intuición justa. Sugestión falsa del mundo moderno; intuición justa del alma, apasionada por cosas muy distintas a la ciencia, el poder y los bienes materiales.”

“El hombre moderno padece una represión de la conciencia” (De “Mitos y neurosis” – Editorial La Aurora).

Una interpretación de la aparente voluntad de Dios, manifestada a través de las leyes naturales, conforma una religión natural. Es posible que tal descripción nos sugiera un sentido de la vida acorde a la finalidad aparente de esas leyes. Sin embargo, el hombre ha adoptado otras “religiones” que poco tienen que ver con el fundamento de la ley natural. Paul Tournier escribió:

“Los verdaderos problemas de los hombres son de tipo metafísico, religioso y afectivo. Son los problemas que el médico descubre en las almas atormentadas que cada vez en mayor número vienen a consultarlo: el temor, la angustia de la muerte, el remordimiento, la sed de ser amado y perdonado. Ni la ciencia, que permanece muda ante lo irracional, ni el liberalismo indiferente por la necesidad de comunión humana, ni el socialismo ciego ante el pecado responden a estos requerimientos”.

La ciencia tiene por objeto describir las leyes naturales. De ahí que, cuando describe las leyes que gobiernan al propio ser humano, estamos a un paso de llegar a describir lo que el hombre es. Luego, tratando de optimizar lo que el hombre es, llegamos a la conclusión de lo que el hombre debe ser. Es importante que las ciencias sociales abandonen su tradicional neutralidad al respecto, ya que la propia ética deberá caer bajo el dominio de la indagación científica.

El vínculo concreto entre ciencia y religión radica en la conciencia moral del hombre. Localizada en alguna parte de nuestro cerebro, hace que tengamos presentes los efectos que en los demás podrán ocasionar nuestras actitudes y nuestras acciones. Este conocimiento orientará nuestras decisiones cotidianas en alguno de los sentidos posibles, es decir, buscando un beneficio de los demás, o un beneficio mutuo o el de cada uno de nosotros con exclusividad.

Anaximander
30/07/2006, 17:27
estimado Sr. Zigrino,

he leído su texto con aprecio pero a la vez aprensión. Por que el nihilismo ajeno deja un vacío en las almas de la gente, que ya perdieron su fe, debido al dogmatismo de algunos representantes de las iglesias, y ciertos poderes políticos malintencionados que emplearon la fe para llegar a sus propios objetivos.

Sin embargo, el deseo de un desarrollo espiritual se queda sin ser correspondido y busca otras vías. Observo una tendencia de una búsqueda desesperada para llenar ese vacío con creencias de cada forma. De toda manera, ya sea la creencia en el “nihil” o la en la astrología, así como en la ciencia: el hombre queda un ser con deseos a alcanzar a una transcendencia, un orden, o como usted formula, conjuntos de leyes.

Gracias a Dios (pun intended) el dogmatismo ahora se queda con los ateos y ateístas.

Pompilio Zigrino
30/07/2006, 18:05
Viktor Frankl nos habla del vacío existencial como sinónimo de falta de sentido dado a la vida. Todos los problemas humanos derivarían de la falta de sentido.

La cuestión de la religión actual es que mantiene interpretaciones rígidas de los libros sagrados, que no alcanzan a convencer a la gente. Creo que en estas épocas, no podemos darnos el lujo de menospreciar a la ciencia y a los conocimientos que brinda. Cuando la religión incorpore a la ciencia, y no se oponga a ella, es posible que la religión llegue a mayor cantidad de gente.

José-1970
30/07/2006, 21:43
Viktor Frankl nos habla del vacío existencial como sinónimo de falta de sentido dado a la vida. Todos los problemas humanos derivarían de la falta de sentido.

La cuestión de la religión actual es que mantiene interpretaciones rígidas de los libros sagrados, que no alcanzan a convencer a la gente. Creo que en estas épocas, no podemos darnos el lujo de menospreciar a la ciencia y a los conocimientos que brinda. Cuando la religión incorpore a la ciencia, y no se oponga a ella, es posible que la religión llegue a mayor cantidad de gente.

De acuerdo con lo que señaló sobre Viktor Frankl.
En mi caso, lo que da verdadero sentido a mi vida, es Cristo mismo. Cada vez son más las horas que invierto en estudios teológicos, aunque de momento soy un humilde autodidacta.

rapipu
31/07/2006, 08:43
De acuerdo con lo que señaló sobre Viktor Frankl.
En mi caso, lo que da verdadero sentido a mi vida, es Cristo mismo. Cada vez son más las horas que invierto en estudios teológicos, aunque de momento soy un humilde autodidacta.

De que forma te sirve Cristo?, como es eso que el sentido de una vida sea algo etéreo y desconocido, inexistente?, acaso no es una obesión como otra cualquiera?.
Pero bien, si ese sentimiento te hace sentir humano y haces sentir tu humanidad al resto, entonces está justificado en su fin y las formas no significan nada, pero si caes en el mismo error que casi todos los cristianos que conozco, no entenderé jamás esa "manía".

José-1970
31/07/2006, 11:52
De que forma te sirve Cristo?, como es eso que el sentido de una vida sea algo etéreo y desconocido, inexistente?, acaso no es una obesión como otra cualquiera?.
Pero bien, si ese sentimiento te hace sentir humano y haces sentir tu humanidad al resto, entonces está justificado en su fin y las formas no significan nada, pero si caes en el mismo error que casi todos los cristianos que conozco, no entenderé jamás esa "manía".

"Etéreo", sí, porque por más que yo quiera, no puedo ponerme a cenar con El en un restaurant, tal como lo hago con mis amigos de carne y hueso. No tengo esa gracia, como la tuvieron según mi convicción Pedro, Santiago, Juan, etc. en aquella época.
"Inexistente", NO. Ahí no coincido, Rapipu, porque aunque no se lo vea ni se lo pueda tocar, yo te lo puedo comparar (y me quedo corto) con el viento, o con una brisa: no se lo ve pero se lo SIENTE, en el sentido de que ves el accionar del Espíritu Santo. Si te pones a analizar tu vida como si fuera un video, verás cuántas coincidencias hubo, de cuántas fieras saliste porque las cosas se fueron concatenando de formas inusitadas; o te encuentras con la persona justa en el momento preciso, etc. etc. Ejemplos múltiples. Son cosas vivenciales, es algo personal, con ciertos foristas siempre decimos que es "intransferible". Por otro lado, se trata de dejar de negar que algo existe porque no se lo vea ni se lo toque, se insitió mucho en ésto de que no solo es real aquello que se percibe con el ojo, o el oído o el tacto, etc.
Saludos

Pompilio Zigrino
31/07/2006, 20:20
Podríamos decir con William James: "Cristo es real porque produce efectos reales". Si uno lee los Evangelios, ellos producen efectos reales.

Tampoco los que aquí escribimos podemos vernos, pero nuestros escritos producen en los demás algún efecto. De ahí que somos reales.

rapipu
01/08/2006, 08:19
Podríamos decir con William James: "Cristo es real porque produce efectos reales". Si uno lee los Evangelios, ellos producen efectos reales.

Tampoco los que aquí escribimos podemos vernos, pero nuestros escritos producen en los demás algún efecto. De ahí que somos reales.

Cierto, una vez cuando yo era monagillo el cura dejo caer un libraco de esos gordos en mi pie y realmente me hizo mucho daño.

Pompilio Zigrino
01/08/2006, 17:21
Hay libros que orientan las decisiones de la gente, no es chiste. He leído de muchos que se dedicaron a la medicina porque leyeron "Cazadores de microbios", de Paul Kruif.

De la misma forma, hay gente que se dedica la cristianismo por haber leído la Biblia, y eso es real y práctico.

O los libros no influyen en los lectores ?