el no ser de la literatura

[marchello]

http://www.georgetown.edu/faculty/irvinem/visualarts/magritte-pipe-sm.jpg


Este conocido cuadro del pintor belga Magritte se titula

"Esto no es una pipa" y resulta ser una paradoja.

En efecto,lo que vemos no es una pipa pues no es el artefacto

mismo que nos permite fumar pero si lo es en cuanto a remitirnos a dicho objeto.

En la literatura sucede algo similar.

La literatura es primero que nada leer,hacer o no de lo leido una experiencia

vivencial (depende del agrado de lo leido) es anterior a los ensayos,criticas,
referencias biograficas o historicas de lo leido.Eso vendra después y por cierto enriquecera nuestra lectura.Exhaltar el gusto por la lectura mas que por el estudio paraliterario debe ser asumido como tarea prioritaria.¿Como? No lo sé pero estoy de acuerdo con esta idea.
(Extraido de "Obras maestras del relato breve".Ed.Oceano.)

[rapipu]

La indicación pedagógica mencionada anteriormente pretende valorizar la lectura por
por sobre las consideraciones extra-literarias como son el estilo,periodo,vida del autor y demáses.Aunque la observación va diriguida a quienes pretenden enseñar literatura,yo mismo me siento aludido en de dicha critica.¿Podría yo alabar las virtudes de "El quijote de la Mancha" ó el estilo de "Madame Bovary"?
Según dicha observación,yo no podría hacerlo porque aunque si halla leído análisis del Quijote o la biografía de Flaubert,me ha faltado lo mas obvio he importante de todo,leer el libro mismo.¿Porque,si poso como amante de los libros ,no los he leido?
Porque a las pocas paginas terminan aburriendome ,ese a sido el motivo.
El asunto expuesto por los editores de esta antología me pareció interesante porque insinua un tema importante :la diferencia entre honestidad y la verdad
Talvez podría hablar maravillas de mucho libros ya clasicos:mencionar su estilo,valores e incluso citar pedazos del libro.Actuando así es posible que gran verdad diría,sería la verdad ,aunque coincida como lugar común o "politicamente correcto" pero,no sería honesto.
Solo sería humo en los ojos,palabras prestadas a otros sobre algo que desconozco.
Por otro lado,alzandome contra el mundo, podría decir que "El quijote.." es una ****** y "Mme.Bovary " no más que un folletín cebollero.Ello sería honesto para quien lo leyó pues nace de su experiencia lectora ,pero falso para el mundo.
Dura encrucijada se me ha puesto entre lo honesto y lo verdadero cuyo alcance me remite a algo mas que los libros.¿Puedo criticar a los argentinos siendo chileno,compadecer la pobreza siendo clase media ó alabar el matrimonio siendo soltero? .

No te falta verdad en tu escrito Marchelo pero hay matices que estoy en desacuerdo, por entrar en la provocación o simplemente en el poco manejo que tengamos del medio podiamos decir claramente que el Quijoe es una ******, pero no seriamos honestos como escribes, la honestidad sin miedo al ridículo (simplemente por tu gusto) podia estar en emitir un "no me gusta" pero sin entrar en valoraciones técnicas, pues ahí o no sabemos o extremamos nuestro juicio, por supuesto que hay literatura bien y mal escrita, hay folletines y grandes obras, pero el hecho de que no te gusten no las hace ****** y calificarlas de ese modo tampoco te hace honesto, a mi me pasa un caso parecido con García Márquez o Paulo Coelho, buenos escritores, buenos narradores con una gran técnica y poder de convicción enorme, pero no me gustan y no por ello los voy a tachar de ******s, no sería honesto por la sencilla razón de que no lo son.
La verdad es que desconozco el motivo concreto, pero tengo una lista negra de autores mundialmente considerados que no me seducen en absoluto me quedé en el primer intento, Paul Auster, los ya mencionados, Vazquez Montalban etcetc, soy honesto en decir que no me gusta pero no lo soy y tampoco justo en calificarlos de ******.
En lo que si estoy de acuerdo es el código maldito de lo clásico, que por serlo tenga que ser bueno o bien porque la crítica lo subió a los altares, al entrar en la leyenda de autores de culto parece que son intocables, uno tiene todo el derecho a dudar o simplemente a renunciar a sus lecturas, el mejor ejemplo para mi es la novela En busca del Tiempo Perdido de Marcel Proust, libro que a pesar de múltiples intentos nunca pude digerir ni terminar, me pregunté muchas veces si realmente estoy preparado para ello.