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Ver la versión completa : La Bella Ilusión de la Tolerancia



jorgesalaz
09/12/2005, 03:01
La bella ilusión de la tolerancia

Sin duda que cuando hablamos de tolerancia entramos en un terreno difícil de precisar. Por tolerancia entendemos de un modo casi inmediato un valor y una virtud que toda persona que forma parte de este nuevo mundo globalizado ha de desarrollar.

En efecto, se afirma que la tolerancia es un valor esencial para la convivencia entre las personas humanas. Sin él la convivencia entre unos y otros sería imposible, puesto que en la naturaleza del ser humano reside la individualidad y unicidad constitutivas del ser personal, la cual de por sí acentúa las diferencias entre las personas. Como todos somos diferentes se parte del supuesto que para poder vivir en comunidad debemos aprender a tolerar a los demás.

Se sostiene que la tolerancia es una virtud encomiable. Quien es tolerante es una persona digna de respeto y admiración puesto que es capaz de aceptar a los demás y de esta forma se destaca por su capacidad gregaria. Valoramos a quienes son capaces de salir de sí y de encontrase con otros, aun a pesar de sus diferencias.

Creemos que la tolerancia es un valor que permite la convivencia, en especial en el plano ideológico, puesto que es importante para una sociedad aceptar la diversidad y convivir con todas las manifestaciones de la cultura. En especial en círculos de corte agnóstico aparece como una necesidad importante valorar el respeto por las ideas ajenas a toda tradición católica o cristiana, puesto que siempre aparece el riesgo inquisidor de las fuerzas ocultas de creyentes que manipulan y dominan el desarrollo de los pueblos para su beneficio personal.

Ante la evidencia de un mundo cada vez más intercomunicado, en el cual podemos interactuar con otras personas de culturas completamente diversas y ajenas a nuestra tradición cristiana occidental, resulta evidentemente necesario resguardar la importancia de un principio como la tolerancia que efectivamente permita una convivencia armónica entre las personas.

¿Es realmente un valor o una virtud?


Interesante resulta apreciar la génesis del concepto de tolerancia. Según Ferrater Mora es un concepto que surge de las guerras de tipo religioso que inundaron Europa, por ello se refiere a la convivencia pacífica que puede existir entre católicos y protestantes. A raíz de esto se puede considerar en diversos sentidos:

Indulgencia respecto a otras doctrinas.
Respeto a enunciados y prácticas políticas siempre que estén enmarcados en lo aceptable por la comunidad.
Comprensión frente a actitudes contrarias que permitan la convivencia entre los que conviven en una sociedad.
Sin embargo, Gianini agrega otras visiones de este concepto que ayudan a clarificarlo. La tolerancia se asocia a la resistencia que poseen ciertos materiales antes de alcanzar un límite que les destruya. En este sentido la tolerancia es capacidad de soportar, de aguantar una situación, credo, idea o a una persona distinta a nosotros. Es en definitiva, en términos de Maturana una negación a largo plazo.

Tal origen hace cuestionar la valía de este principio. En la tradición aristotélica se entiende por virtud una disposición de la persona que lo haga tender hacia la perfección para la cual ha sido creada. En tal sentido la virtud se diferencia del vicio en términos que su aspiración constante es hacia la perfección. Toda virtud tiende a lo mejor. Sin embargo en el caso de la tolerancia esto no ocurre así. Como expone Gianini este principio insiste en soportar lo negativo del otro, a soportar la carga que significa lo que nos desagrada del otro, tal como se aprecia en el contexto en que nace este concepto: la tolerancia religiosa consiste en estar con aquel infiel que no profesa la fe verdadera y que en tal sentido es pecaminosa y contaminante para mí.

Sin embargo, esta postura me hace cuestionar la validez de una actitud así. ¿Desde qué perspectiva se asume que alguna conducta, idea o creencia es negativa? ¿Son mis creencias, mis ideologías, mi manera de ser un referente válido para establecerme como la norma de toda tolerancia?

Aceptación del otro no tolerancia de sus defectos


En el fondo el acto de la tolerancia posee todo lo contrario a la posibilidad de convivencia y de aceptación del otro. En el fondo, tal como lo afirma Maturana hay una negación a largo plazo.

Cuando tolero me convierto en la regla que establece lo correcto de lo inaceptable y al tolerar me convierto en la norma que determina desde mi percepción lo que se espera de mí o no. El “tolerante” es quien se erige a si mismo como criterio de verdad, de corrección, de regulación de lo que debe ser aceptado o no.

¿Todo es tolerable?

Hay límites establecidos para asegurar la convivencia entre las personas. Por ello no todo es tolerable. En el sentido correcto: no todo es aceptable, hay límites establecidos por los valores.

Toda persona es digna de aceptación, sin embargo no todo acto es digno de ser aceptado. Si construyo mis relaciones con los otros desde la perspectiva de mi igualdad con los otros en términos de dignidad, ello no impide que no acepte acciones que atentan contra la dignidad elemental de toda persona.

Mi propuesta es que los valores determinan y regulan el nivel de tolerancia que se debe poseer y en tal medida lo que efectivamente requerimos no es tolerancia, sino aceptación del otro. No necesitamos aceptar lo malo del otro, sino que aprender a convivir con el otro. Y para ello debemos bajar del podio que nos hemos erigido como guardianes de lo correcto e incorrecto, para apreciar que el otro se legitima ante nosotros pro lo que es y luego por lo que hace. De sus acciones determinaremos que conductas son aceptadas o no, pero partiendo de la base de valores estipulados en el consenso de la convivencia.

La invitación es a reconocer lo que del otro es valioso para nuestra convivencia y en la legitimación de nuestras actitudes sociales construir un espacio de mutua aceptación, que nacen de la confianza básica. De esta forma construiremos una verdadera sociedad y evitaremos una disolución prematura de parte de lo que nos constituye en seres humanos: nuestro ser gregario.

Colaboración de Ricardo Diaz
www.ricardodiaz.org/archives/

Claumar
14/12/2005, 13:48
Interesante tu post jorge...hay que aprender a aceptar a a las personas tal y como son...todos somos diferentes...y en la medida de lo posible podemos convivir mejor...saluditossss

amigo
15/12/2005, 14:34
hey simple curiosidad ? como hacen para leertanto texto? de verdad no puedo concentrarme en la pantalla..

otra consulta claumar eres lisiada?¿?

Mircko
15/12/2005, 15:57
.... Pero si el texto estaba segmentado, claramente legible y entendible AMIGO, tal vez en tu pantalla o cerca de ella había algo que desconcentraba y eso dificulte tu entendimiento....:wink:
Ahhh.... me parece muy desagradable y descortés preguntarle tan sueltamente a una Dama como CLAUMAR, si es lisiada o no...
Existen maneras mas adecuadas no te parece?
Saludos...



hey simple curiosidad ? como hacen para leertanto texto? de verdad no puedo concentrarme en la pantalla..

otra consulta claumar eres lisiada?¿?

amigo
15/12/2005, 18:06
digame usted como podria preguntarselo , aver ?

a mi parece bien preguntarle directamente o no?

que dice ella?

Claumar
15/12/2005, 18:59
Pues mira amigo si no se puede concentrar en la pantalla copielo en word y lo imprime...y así lo lee mejor..es una sugerencia...

En cuanto a si soy lisiada...no lo soy...

José Luis amigo gracias...

Saludos que tengan buen día....