PDA

Ver la versión completa : Una despedida



Nekkar
10/01/2005, 18:19
Lloro por tu partida...
Sé que es hora de decir adiós...
Se que lo único que nos queda es asumir nuestra derrota...
Sé que no podré evitar que te vayas de mi lado...
Pero solo necesito, para seguir viviendo, para continuar hacia delante, que me jures que volverás a mí algún día...
Aunque me mientas: necesito escuchar esas palabras salir de tus labios.
Imagino cómo tu silueta se desvanecerá poco a poco por el camino de mi alma y te irás alejando más y más...Me angustio solo de pensarlo.
Me convenzo a mi misma que nuestras vidas se volverán a encontrar, como tantas veces lo hicieron, pero me da miedo que no sea así.
Dicen que para saber del amor de alguien, hay que dejarle libre y que si vuelve, será de uno para siempre; pero hay ocasiones, en que los riesgos son mucho más fuertes que el propio sentimiento y algo me dice, que tú no regresarás...
Sé que mi amor es seguro, pero me gustaría que el tuyo lo fuera mucho más y para eso, solo tú puedes ayudarte y salir hacia delante.
Te necesito a mi lado y sé que tú no.
Necesito que me quieras como nadie lo hizo nunca, necesito que me cuides como tu más preciado tesoro...
Lloras y sé que tus lágrimas son sinceras.
La pérdida siempre es dolorosa y no dudo que un puñal no haya atravesado tu corazón esta vez; pero el mío es una gran diana llena de flechas amargas, flechas de desilusión.
Sé que tu promesa es honesta, pero me asusta sólo el pensar que conozcas a otra mujer más especial de lo que yo llegué a ser para ti.
Mi cabeza no contempla ni siquiera, la idea de saber que alguien te besará como no lo hice yo...
Que alguien te hará sentir lo que yo no pude hacerte sentir...
Que otra mujer dormirá a tu lado cada noche y se despertará abrazada a ti cada madrugada...
Sentados en un banco nos miramos a los ojos fijamente mientras las lágrimas caen por nuestras mejillas a la par y no podemos hacer nada por evitarlo.
El sufrimiento endurece nuestras almas, apaleadas por tantas historias inalcanzables...
La despedida es dura, pero más duro será no sentir el calor de tu cuerpo cerca del mío.
No sentir tus besos y caricias cada madrugada, ni la música de tu risa cada atardecer, cuando todo se convierta en un solo corazón, en un solo espíritu y nuestras esencias se fusionen dando paso a un aroma de vida.
Sé que me quieres, pero me da miedo que nuestro amor no sea tan fuerte como para aguantar la distancia. A veces, no basta con solo querer.
Cada vez que me rozas tímidamente con tus dedos, mi piel se desgarra con los cuchillos de las promesas incumplidas.
Poco a poco, mi amor se va desangrando y parándose mi respiración. No siento el oxígeno vital que recorra mi ser y me falta ilusión, ganas de vivir, deseos de comenzar de nuevo...
Nada tiene sentido en mi vida si tú no estás para compartirlo conmigo.
Ni sentido tiene todo lo prometido, si ya no me quieres, si ya no soy la mujer con la que sueñas cada noche y con la que desearías despertar cada mañana de tu vida...
Pasas tu brazo por mis hombros mientras me miras atentamente como si fuese el último instante que me observases: cada pliegue de mi piel, cada destello de mis ojos: color sangre del sufrimiento...
Tu mirada perdida y asustada de niño, me conmueve.
El final intimida y hace que la inseguridad caiga sobre nuestras vidas, sobre nuestros mundos...hasta ahora en perfecta armonía.
Tus ojos narran todo lo que no me dijiste una vez e intentas expresarlo a través de un único gesto, sin cruzar una palabra, antes de irte.
No te culpo por nuestra historia inacabada, ni me culpo a mi...
Todo es producto de una separación de nuestros caminos, de lo que queremos que signifiquen nuestras vidas...
Yo siempre seguí mi camino, que solía ser el tuyo, pero ahora todo ha cambiado, nada es como fue entonces.
Aquellos días de vino, rosas y atardececeres mágicos, han dado paso a la indeferencia, el rencor, las mentiras y la incredulidad...
Por mucho que luchemos, la música del final suena fuerte, segura y precisa: no dando tregua alguna a la duda.
Los caminos se van separando sin poder dar marcha atrás...
Las vidas se van dividiendo, las pasiones dispersando y cada uno de los sueños, en su día compartidos, se evaden lentamente en el silencio de la noche...
Pero así es la ley que rige el mundo: la vida sigue y las historias pasan...

M.P


Un besazo
Nekkar