idem
06/09/2004, 07:30
04/09/04
Hoy mirabas el café como si te fuera la vida en ello, como si aquel líquido te estuviera contando todos los secretos que siempre nos hemos callado. No quieres entender que quiera mi espacio, que necesite ese espacio para no sentirme encadenada a tí. Dices que te asusta estar sólo, yo creo que te asusta más estar conmigo...
Me ofreces calles cortadas, callejones oscuros por donde no quiero ir.
Tal vez debería echar a andar por alguna de esas calles, lanzarme al vacío por tí una vez más, aunque sepa que algún día descubriré que no hay salida, pero no me siento con fuerzas para empezar de nuevo...
No quiero remiendos, parches que tapen provisionalmente la herida, no quiero "promesas-trampa" de esas que se te dan tan bien, porque hace mucho tiempo descubrí que se caen simplemente poniendo un poco de peso encima.
Hoy vuelves a ofrecérmelas, como siempre, y hoy ya no las quiero. Y no me importa contarte cuántas veces me mordí el alma para que no se perdiera tras tus pasos, ya no soy esa marioneta que movías a tu antojo...corté los hilos.
Besos, Idem
Hoy mirabas el café como si te fuera la vida en ello, como si aquel líquido te estuviera contando todos los secretos que siempre nos hemos callado. No quieres entender que quiera mi espacio, que necesite ese espacio para no sentirme encadenada a tí. Dices que te asusta estar sólo, yo creo que te asusta más estar conmigo...
Me ofreces calles cortadas, callejones oscuros por donde no quiero ir.
Tal vez debería echar a andar por alguna de esas calles, lanzarme al vacío por tí una vez más, aunque sepa que algún día descubriré que no hay salida, pero no me siento con fuerzas para empezar de nuevo...
No quiero remiendos, parches que tapen provisionalmente la herida, no quiero "promesas-trampa" de esas que se te dan tan bien, porque hace mucho tiempo descubrí que se caen simplemente poniendo un poco de peso encima.
Hoy vuelves a ofrecérmelas, como siempre, y hoy ya no las quiero. Y no me importa contarte cuántas veces me mordí el alma para que no se perdiera tras tus pasos, ya no soy esa marioneta que movías a tu antojo...corté los hilos.
Besos, Idem