Claumar
21/04/2004, 17:09
Hola a todos los chicos y chicas del foro:
Me encontré con este texto, y lo comparto con ustedes.
Ojalá que siempre podamos tener la sabiduría e inteligencia necesaria para que las malas vibras de las personas a nuestro alrededor, (que suelen a veces aparecer en nuestras vidas y en muchos casos sin ni siquiera darnos cuenta) no interfieran en
éstas, y que no nos hagan cambiar nuestra verdadera esencia.
Cuenta la leyenda, que una vez, una serpiente empezó a perseguir a una luciérnaga; Ésta huía rápido con miedo, de la feroz depredadora, y la serpiente no pensaba desistir; Huyó un día, y ella no desistía, dos días y nada. En el tercer día, ya sin fuerzas, la luciérnaga paró y dijo a la serpiente:
- ¿Puedo hacerte tres preguntas? le dijo la luciérnaga.
La serpiente le responde: No acostumbro dar éste precedente a nadie pero como te voy a devorar, puedes preguntar.
- ¿Pertenezco a tu cadena alimenticia? le dijo la luciérnaga.
La serpiente le responde : No.
- ¿Yo te hice algún mal? le dijo la luciérnaga.
La serpiente le responde : No.
- Entonces, ¿Por qué quieres acabar conmigo?, le dijo la luciérnaga.
La serpiente le responde: Porque no soporto verte brillar.
Piensa en esto, y selecciona a las personas en quien confiar. Muchos de nosotros muchas veces nos hemos visto envueltos en situaciones donde nos preguntamos: ¿Por qué me pasa esto si yo no he hecho nada malo? Sencillo, porque no soportan verte brillar.
Colaboración enviada por María del Roble Bernardac
Saludos desde México.
CML
Me encontré con este texto, y lo comparto con ustedes.
Ojalá que siempre podamos tener la sabiduría e inteligencia necesaria para que las malas vibras de las personas a nuestro alrededor, (que suelen a veces aparecer en nuestras vidas y en muchos casos sin ni siquiera darnos cuenta) no interfieran en
éstas, y que no nos hagan cambiar nuestra verdadera esencia.
Cuenta la leyenda, que una vez, una serpiente empezó a perseguir a una luciérnaga; Ésta huía rápido con miedo, de la feroz depredadora, y la serpiente no pensaba desistir; Huyó un día, y ella no desistía, dos días y nada. En el tercer día, ya sin fuerzas, la luciérnaga paró y dijo a la serpiente:
- ¿Puedo hacerte tres preguntas? le dijo la luciérnaga.
La serpiente le responde: No acostumbro dar éste precedente a nadie pero como te voy a devorar, puedes preguntar.
- ¿Pertenezco a tu cadena alimenticia? le dijo la luciérnaga.
La serpiente le responde : No.
- ¿Yo te hice algún mal? le dijo la luciérnaga.
La serpiente le responde : No.
- Entonces, ¿Por qué quieres acabar conmigo?, le dijo la luciérnaga.
La serpiente le responde: Porque no soporto verte brillar.
Piensa en esto, y selecciona a las personas en quien confiar. Muchos de nosotros muchas veces nos hemos visto envueltos en situaciones donde nos preguntamos: ¿Por qué me pasa esto si yo no he hecho nada malo? Sencillo, porque no soportan verte brillar.
Colaboración enviada por María del Roble Bernardac
Saludos desde México.
CML