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juanerick
08/03/2004, 20:07
Limpieza Femenina

es fundamental que la zona genital se mantenga perfectamente limpia, para lo cual se requiere delicado lavado con agua y jabón neutro, pues mediante la higiene es posible prevenir el mal olor y la aparición de infecciones. Así, es recomendable lavar la vulva por el exterior, pasando bien los dedos por los pliegues de los labios mayores y menores, y alrededor del clítoris, ya que aquí también se acumulan residuos. La vagina, salvo que lo prescriba el ginecólogo y ante situaciones muy concretas, no debe ser aseada en su interior, ya que tiene su propio mecanismo depurador.

Sin embargo, muchas veces no basta con la limpieza que el baño proporciona debido a que existen factores externos que alteran la higiene, entre los que se encuentran:

Uso de ropa interior ajustada y elaborada con materiales sintéticos.
Empleo de jabón con fragancia para lavar la zona genital, pues este tipo de producto puede ocasionar irritación y alergia.
Aplicación de atomizadores y jaleas anticonceptivas, ya que pueden causar molestias y desequilibrar la flora vaginal.
Las relaciones sexuales llegan a generar alteraciones químicas y en la higiene vaginal; además, son "puerta abierta" a infecciones de transmisión sexual.
La práctica de sexo oral sin previo aseo bucal contamina y daña la zona genital.
El periodo menstrual, ya que no cambiar toallas o tampones en lapso de 4 a 6 horas puede generar mal olor.
Cambios hormonales durante la pubertad, embarazo y menopausia.
Por lo anterior, la higiene íntima debe incluir -además del lavado con agua y jabón neutro- los siguientes cuidados:

Usar ropa interior de algodón, ya que el nailon y demás fibras sintéticas favorecen la retención de humedad y el cultivo de bacterias.
No vestir prendas muy ajustadas o pantimedias para evitar rozaduras o que se acumule humedad; en general, la mayoría de la ropa impide la ventilación adecuada, por lo que la higiene íntima debe ser continua, sin que este buen hábito se vuelva obsesión.
Utilizar toallas y tampones durante lapsos no muy prolongados; se recomienda cambiarlos cada 4 a 6 horas.
Antes de tener contacto sexual es recomendable lavar perfectamente bien las manos para evitar que los genitales se infesten de bacterias durante los juegos eróticos; asimismo, es fundamental asear la boca antes de tener sexo oral.
No es conveniente realizar duchas vaginales frecuentes porque suelen eliminar sustancias naturales y microorganismos que protegen a la vagina; lo recomendable es recurrir a ellas cuando el ginecólogo lo indique.
No usar esponja o guantes sintéticos para limpiar la zona genital, porque en ellos se acumulan infinidad de gérmenes.
Evitar y/o moderar la aplicación de desodorantes íntimos porque pueden causar irritación, inflamación o reacción alérgica; además, impiden percibir por su olor alteraciones que pudieran requerir tratamiento médico específico.
Realizar la higiene anal hacia atrás para evitar contaminar la zona vaginal con bacterias procedentes de las heces.
Cabe destacar que si una mujer presenta fluido vaginal copioso, color muy amarillo o verdoso o de olor fuerte y desagradable, es probable que padezca alguna infección vaginal, por lo que será recomendable que acuda al ginecólogo, especialista que tomará en cuenta los síntomas descritos por la paciente, hará revisión física y análisis del flujo, elementos que le permitirán determinar si es a causa de:
Bacterias. Generalmente se transmiten al tener relaciones sexuales sin protección y dan lugar a producción escasa de flujo vaginal de olor fétido y color grisáceo.

Hongos. El principal es el denominado Candida albicans, el cual habita de manera natural en la vagina, pero debido a cambios hormonales, administración de antibióticos fuertes y reducción de las defensas puede reproducirse sin control, generando la aparición de flujo espeso, blanquecino y de consistencia cremosa (similar al requesón), además de comezón genital intensa.

Parásitos. Se adquieren mediante la práctica sexual sin protección con personas infectadas, lo que causa secreción abundante de flujo verdoso y de olor muy fétido, picazón genital y ardor al orinar.

De acuerdo a los resultados de los análisis el ginecólogo recomendará el tratamiento más adecuado, el cual puede ser a base de antimicóticos (cuando la infección es causada por hongos) o antibióticos (si la afección se debe a bacterias o parásitos). En ocasiones, el especialista podrá prescribir un antiséptico vaginal que ayude a calmar el ardor y la comezón, al mismo tiempo que disminuye el flujo y elimina el mal olor.

Grandes aliados
La menstruación es un factor importante al hablar de higiene íntima, pues aunque la sangre que fluye hacia el exterior es limpia, resulta necesario cambiar varias veces al día la toalla o tampón, lo cual debe apoyarse con la limpieza durante el baño matutino y lavado nocturno. Con el fin de proporcionar mayor comodidad a la mujer en esta etapa, la industria farmacéutica ha desarrollado los siguientes productos en diversas presentaciones:

Toallas sanitarias. Compresas absorbentes que se fijan a la ropa interior con adhesivo, las cuales pueden encontrarse como:
Protectores de uso diario (son pequeños, muy delgados y se utilizan para los días de poco flujo menstrual o entre periodos no menstruales para absorber el flujo vaginal).
Normales (son más gruesas y de mayor tamaño que los anteriores).
Súper delgadas (son muy absorbentes y cómodas).
Con malla (cubierta que actúa como barrera que impide que el líquido regrese de nuevo a la superficie).
Con alas (envuelven el puente de la pantaleta ayudando a mantener la toalla en su lugar).
Con canales (dirigen la humedad a lo largo de la compresa).
Con gel (atrapan los líquidos y los gelatinizan).
Para usar con tanga.
Tampones. Cilindro elaborado con fibras comprimidas de algodón que absorbe el flujo dentro de la vagina y, por tanto, ofrece mayor seguridad; no debe dejarse más de seis horas, pues se corre riesgo de sufrir síndrome de choque tóxico, que se caracteriza por fiebre, dolor muscular y presión arterial baja. Existen en distintos tamaños, con o sin aplicador, y permiten a la mujer vestirse a su gusto e, incluso, nadar.

Toallitas húmedas. Elaboradas con fibras naturales y provistas de sustancias hipoalergénicas (que no causan reacción alérgica), son útiles para limpiar delicadamente la zona genital después de orinar y/o cambiar la toalla sanitaria o tampón.

Para la incontinencia
La pérdida involuntaria de orina o incontinencia urinaria también representa cierto problema en la higiene íntima femenina, pues tanto la zona genital como la ropa interior se mantienen húmedas generando desagradable olor y permitiendo la reproducción de microorganismos causantes de infecciones.

Este padecimiento puede presentarse a causa de infección en los genitales o vías urinarias, administración de algún medicamento, debilidad de los músculos que sostienen la vejiga, aumento de actividad muscular de este órgano, bloqueo de la uretra urinaria (conducto por donde se expulsa la orina), inmovilidad, trastornos neurológicos o problemas hormonales.

Otro tipo de incontinencia que también puede afectar de manera importante es la de tipo fecal, ya que ocasiona que el excremento se escape o gotee del recto cuando uno no lo espera. Esta afección se presenta cuando los músculos anales se debilitan a causa de episiotomía (corte para agrandar la abertura de la vagina y facilitar la salida del bebé durante el parto), operación para tratar hemorroides, absceso o acumulación de bolsas de pus en el ano, daños en la columna vertebral y envejecimiento.

En estos casos se recomienda utilizar productos protectores, de los cuales pueden encontrarse los siguientes:
Compresas. Se parecen a las toallas sanitarias, pero son más absorbentes, poseen forro externo impermeable que evita escurrimientos y sustancias que neutralizan el olor de la orina.

Pañales para adultos. Son ideales para las personas que pierden grandes cantidades de orina, y están provistos de resortes elásticos en las piernas, los que permiten ajuste perfecto; generalmente se ofrecen en tallas pequeña, mediana, grande y extra grande. Asimismo, son de gran utilidad para los pacientes con incontinencia fecal.

Como puede ver, en la actualidad las mujeres pueden vivir al máximo su feminidad gracias a que la industria farmacéutica ofrece cada vez más opciones y productos que les permiten permanecer limpias, sentirse libres y cómodas.

Consulte a su médico.


Fuente: www.saludymedicina.com.mx"