Oso Noble
25/02/2003, 15:44
Se me antojan, para el desayuno, unos huevos al albañil, que es como un omelette, relleno de chorizo y queso Oaxaca, bañado en una picosita salsa verde, acompañado de frijoles refritos bayos y tortillas, Un café de olla (preparado con canela) y pan dulce.
O quizá mejor café con leche y otra pieza de pan dulce. (orejas, bigotes, chilindrinas, corbatas, cuernos, rollos de nuez, conchas... En fin, ya hablaremos de toda la variedad del pan dulce mexicano).
Para un refrigerio entre el desayuno y la comida un coctail de frutas (mango, sandía, melón, papaya, guayaba, manzana etc), con limón y chile. Se le pueden agregar pepinos y jícamas.
Para la comida. Como sopa, una crema de aguacate con trocitos de pan tostado en mantequilla.
Como plato fuerte unas chuletas de cerdo con hongos, crema, queso Chihuahua y chilpotle. Para beber, si eres medio refinado, un vino tinto, chileno, español o mexicano de Baja California, si eres más popular, como un servidor, una cerveza yucateca, (Leon o Montejo).
Para el postre dulces mexicanos (ya hablaremos de ellos) o un flan napolitano, o pastel tres leches o pastel de queso... Rematamos con un café americano y una larga y sabrosa conversación de sobremesa.
Para la cena:
Café con leche, pan dulce y unos molletes, que se hacen con bolillo (pan blanco, como la bagette francesa, pero de tamaño individual) el cuál se parte a la mitad, se retira el migajón, se unta mantequilla, frijoles, se le pone queso Oaxaca, manchego o Chihuahua y se meten al horno caliente durante unos 5 minutos y a saborear.
¡La vida es bella, caramba!
O quizá mejor café con leche y otra pieza de pan dulce. (orejas, bigotes, chilindrinas, corbatas, cuernos, rollos de nuez, conchas... En fin, ya hablaremos de toda la variedad del pan dulce mexicano).
Para un refrigerio entre el desayuno y la comida un coctail de frutas (mango, sandía, melón, papaya, guayaba, manzana etc), con limón y chile. Se le pueden agregar pepinos y jícamas.
Para la comida. Como sopa, una crema de aguacate con trocitos de pan tostado en mantequilla.
Como plato fuerte unas chuletas de cerdo con hongos, crema, queso Chihuahua y chilpotle. Para beber, si eres medio refinado, un vino tinto, chileno, español o mexicano de Baja California, si eres más popular, como un servidor, una cerveza yucateca, (Leon o Montejo).
Para el postre dulces mexicanos (ya hablaremos de ellos) o un flan napolitano, o pastel tres leches o pastel de queso... Rematamos con un café americano y una larga y sabrosa conversación de sobremesa.
Para la cena:
Café con leche, pan dulce y unos molletes, que se hacen con bolillo (pan blanco, como la bagette francesa, pero de tamaño individual) el cuál se parte a la mitad, se retira el migajón, se unta mantequilla, frijoles, se le pone queso Oaxaca, manchego o Chihuahua y se meten al horno caliente durante unos 5 minutos y a saborear.
¡La vida es bella, caramba!