serotonina
12/02/2003, 13:47
Footing
Estoy corriendo…….. Sigo corriendo……. ¡joder ! tan solo hace diez minutos que corro y me encuentro más cansado de lo habitual a estas alturas. Sigo corriendo…… Intento pensar en algo que me lo haga más ameno. Siempre me a dado resultado. Sigo corriendo...... será ********** el de la caja de ahorros lo que me llegó a decir ayer. Sigo corriendo…… realmente estoy cansado. Sigo corriendo……
Quizá se deba a la [censurado] de pastillas que me recetó el psiquiatra anteayer para esta [censurado] depresión. Sigo corriendo……aunque también puede ser el no haber desayunado. Claro, no comer nada desde hace diez horas, puede influir en mi rendimiento. Sigo corriendo…… ¡ hostia ! se me olvidó re***** ayer el móvil reparado. Sigo corriendo…… Definitivamente, no haber desayunado, si seguro, no desayunar. Sigo corriendo…… Estoy pensando en la bronca de anoche con mi mujer. Sigo corriendo…… La verdad no entiendo sus reproches. Que si Ricard no te veo nunca, que si cuando te veo tienes trabajo pendiente, que si no salimos a penas solos, que cuando salimos juntos tiene que ser para eventos que tienen que ver con el partido, que si ya no me acuerdo la última vez que me dijiste te quiero, que desde que eres senador esto ya no es lo que era. Joder, y que quiere. Un senador tiene sus obligaciones. Sigo corriendo…… Por otro lado, no entiende que yo necesito estar solo para reflexionar mis cosas, ordenar mis pensamientos, es MI TIEMPO. Sigo corriendo…… Además de que **** se queja, le he puesto una asistenta para que la ayude en las tareas de casa, hace dos semanas que ha estrenado un coche y hasta cuando me ha planteado lo de tener un hijo le he dicho que sí. Sigo corriendo …… se me acelera el pulso cada vez más. Sigo corriendo…… Será capullo Gregori, pues, no me ha dicho que no hay coherencia entre las ideas izquierdistas que pregono y pregona mi partido con mi forma de hablar y actuar en según que situaciones. Sigo corriendo…… Que sabrá él lo que pienso y dejo de pensar. Sigo corriendo…… Joder, ya no puedo más, que manera de sudar más anormal, si no paro y descanso me va a dar algo. Sigo corriendo…… se me está nublado la vista. Me aprieta el pecho como si tuviera encima una plancha de acero gigantesca, ¡ ¡que dolor joder ! siento que me voy a desmayar, todo me da vueltas. Me caigo al suelo.
Ya no siento dolor. Me siento extraño. ¿ estaré muerto ?
Hola amigo. – Me dicen -
¿ que es esto? ¿ donde estoy? ¿ quién eres tú ?
Soy, digamos para que lo entiendas, tu Angel de la guarda.
Por lo tanto, estoy muerto.
Hombre, yo no diría tanto. Lo primero que debes tener en cuenta, es que sepas que todo cuanto te está ocurriendo es absolutamente cierto y real. Que ya no estás en tu mundo. Te encuentras en un estado intermedio. Es donde decidimos si tu cuerpo y tu alma desaparecen definitivamente. Como dirían los cristianos de tu mundo, te encuentras en el purgatorio.
Lo segundo que debes tener en cuenta, es que, el que estés aquí es un error, es decir, no te tocaba morir.
La cuestión es que estoy aquí. Y sabes que pienso, que no hace ni cinco minutos que he dejado mi mundo y ya lo echo de menos. Echo de menos, la luz del día, ¿ aquí siempre hay tan poca luz?, echo de menos el aire, los arboles, el sol ¡ es verdad, hay sol en mi mundo ! Te digo esto porque, de un tiempo a esta parte lo había olvidado. Echo de menos los reproches de Gregorio ¡ joder ! cuanta razón tenía en cuanto a lo de la coherencia.
¿sabes? A veces pienso que me hice de izquierdas porque estaba de moda cuando tenía 18 años y ciertamente, conforme ha pasado el tiempo me he convertido no solo en un conservador sino también en un hipócrita. Digo lo que no hago.
Y, echo de menos a Angela, cuanta razón tenía también. Sabes, la tenía olvidada por completo. Te juro que siempre la he amado pero, no sé que me ha pasado estos últimos meses. Ahora me doy cuenta de que estaba tan absorto en mis obsesiones interiores que no era consciente de que el problema era yo y no los demás. En fin, como ves, no me encontraba en mi mejor momento. Tenía un “cacao” mental tan grande que no era capaz de darme cuenta de todo lo que estaba perdiendo. Sin embargo ahora ya es tarde. Como casi siempre me pasa, ya es tarde para arreglarlo.
No. No es tarde. – me dice - Como te he dicho antes, a ti no te tocaba morir. Ha sido un error, por lo tanto, vas a tener la oportunidad de volver a tu mundo. Ahora eso sí, intenta aplicarte todo de cuanto te has dado cuenta aquí, confía en los que consideras buenos amigos, no te arrepientas de lo anterior pues, si insistes en el arrepentimiento, no lograrás sacar los demonios de la cabeza ni las serpientes del estómago. Simplemente rectifica y solo intenta cambiar aquello con lo que no te sientes cómodo y sobre todo ama a tu mujer si es que realmente siempre la has amado………. Ahora vete. Vuelve a tu mundo y recuerda todo lo hablado.
Estoy tumbado en el suelo. Abro los ojos. Veo el cielo, ¡ veo el cielo ! ¡ hay cielo! Y nubes y arboles y pájaros y aire y sol. ¡ Angela ! quiero ver a Angela. Tengo que decirle lo mucho que la quiero, necesito decírselo. En cualquier caso, no corro, regreso andando. Más que nada, por si acaso. Dos oportunidades como esta es difícil que se presenten.
Llego a casa. La llamo. ¿ Angela?. No responde. Entro al baño y, ahí está, en la bañera, quieta, como dormida. Me acerco ¿Angela? En ese momento comprendo su silencio.
Siento como si tuviera una nube entre mis ojos y mis cejas, que me impide ver, pensar, reaccionar ante una situación que no acabo de asimilar. Es, como cuando en ocasiones me quedo mirando fijamente en un punto mientras reflexiono sobre algo y no veo aunque veo y por más que lo intento no puedo o no me apetece salir de ese estado en el que me encuentro más cómodo.
Siempre tuvo más valor que yo, pero, nunca pensé ...
El cuerpo está totalmente sumergido excepto la cabeza Su nuca apoyada sobre un extremo con una toalla debajo como para morir más cómoda. Sus brazos a ambos lados de su cuerpo y sus manos, sus manos no se ven. A la altura de sus muñecas, dos grandes manchas de un color casi negro en su parte más central y rojizo granate en la zona donde se juntan tapándole el abdomen y haciendo una elipse casi perfecta. Siempre había oído que esa forma de suicidio permitía morir de una manera dulce, sin dolor, como en un estado de sueño . Y así lo parecía.
Sigo sin poder asimilar. Por momentos pienso en la situación que me acababa de ocurrir a mí con aquel extraño personaje. Por momentos vuelvo a mirar el cuerpo de Angela. Por momentos Gregori, el partido, el móvil. No sé lo que me está ocurriendo. No entiendo nada. Me siento abrumado, perdido, culpable. No me pregunto porqué lo ha hecho. Simplemente llego tarde, como siempre.
Rompo a llorar. Noto una pena como jamás la había sentido. Pena de Angela, por haberla llevado a esta situación, por no poder decirle lo que hacía tanto tiempo no le decía, Te quiero. Pena por mí, pues, aun estando vivo me sentía un desgraciado y más muerto que ella.
Ricard despierta. ¿Ricard? Pero, ¿no te das cuenta de la hora que es? Olvídate del footing hoy. Son casi las ocho.
¡ Joder ! ha sido un sueño, un [censurado] sueño. ¡ Dios ! menos mal. Que mal lo he llegado a pasar.
Ricardo ¿te ocurre algo? ¿ porqué me miras con esa cara?
Angela.
Que, Ricardo.
Te quiero.
Sigo corriendo ....... Joder, joder, joder, que paranoia me he montado en un momento. Que si me da un soponcio, que si medio me muero pero no me muero, que si hay un tío raro que me salva y me da otra oportunidad, que Angela se suicida. Sigo corriendo ...... Voy a tener que cambiar a otro deporte que me permita más concentración. Sigo corriendo ...... Tenis, squash, cualquiera de esos estaría bien y además los haría en un horario menos deprimente y acompañado. Sigo corriendo ...... Ahora me siento verdaderamente cansado. Sigo corriendo ...... Claro, con tanto darle al coco, hasta he recorrido algunos kilómetros de más. Sigo corriendo ...... Tengo un sudor frío. Me aprieta el pecho. Se me nubla la vista. Me muero.
Noticia aparecida en el diario “El independiente de Catalunya”
El popular senador Ricard Cincasas del partido PCA ha sido hallado esta mañana muerto en el garaje de su propia casa. En principio se apuntó la idea de un atentado terrorista, pero finalmente, después del levantamiento del cadáver todo apunta al suicidio. Según fuentes de la policía autonómica, cuando su esposa encontró el cuerpo, Ricard Cincasas estaba dentro de su vehículo con el motor en marcha, conectando una manguera de riego desde el tubo de escape e introducida dentro del habitáculo del coche por la una de las ventanillas. Los gases hicieron el resto.
Según informan los médicos forenses, esta forma de suicidio, permite una muerte sin sufrimiento en la que el sujeto va entrando como en una especie de sueño delirante al principio y que, en no más de diez minutos el individuo muere.
Este dramático final, parece tener relación con el estado emocional que,
- según sus allegados - estaba atravesando el senador. Una grave depresión.
Desde estas líneas, queremos añadirnos al dolor de su familia y enviar nuestro más sentido pésame al que en un tiempo, fue columnista de este, su periódico.
rosco. / serotonina
Estoy corriendo…….. Sigo corriendo……. ¡joder ! tan solo hace diez minutos que corro y me encuentro más cansado de lo habitual a estas alturas. Sigo corriendo…… Intento pensar en algo que me lo haga más ameno. Siempre me a dado resultado. Sigo corriendo...... será ********** el de la caja de ahorros lo que me llegó a decir ayer. Sigo corriendo…… realmente estoy cansado. Sigo corriendo……
Quizá se deba a la [censurado] de pastillas que me recetó el psiquiatra anteayer para esta [censurado] depresión. Sigo corriendo……aunque también puede ser el no haber desayunado. Claro, no comer nada desde hace diez horas, puede influir en mi rendimiento. Sigo corriendo…… ¡ hostia ! se me olvidó re***** ayer el móvil reparado. Sigo corriendo…… Definitivamente, no haber desayunado, si seguro, no desayunar. Sigo corriendo…… Estoy pensando en la bronca de anoche con mi mujer. Sigo corriendo…… La verdad no entiendo sus reproches. Que si Ricard no te veo nunca, que si cuando te veo tienes trabajo pendiente, que si no salimos a penas solos, que cuando salimos juntos tiene que ser para eventos que tienen que ver con el partido, que si ya no me acuerdo la última vez que me dijiste te quiero, que desde que eres senador esto ya no es lo que era. Joder, y que quiere. Un senador tiene sus obligaciones. Sigo corriendo…… Por otro lado, no entiende que yo necesito estar solo para reflexionar mis cosas, ordenar mis pensamientos, es MI TIEMPO. Sigo corriendo…… Además de que **** se queja, le he puesto una asistenta para que la ayude en las tareas de casa, hace dos semanas que ha estrenado un coche y hasta cuando me ha planteado lo de tener un hijo le he dicho que sí. Sigo corriendo …… se me acelera el pulso cada vez más. Sigo corriendo…… Será capullo Gregori, pues, no me ha dicho que no hay coherencia entre las ideas izquierdistas que pregono y pregona mi partido con mi forma de hablar y actuar en según que situaciones. Sigo corriendo…… Que sabrá él lo que pienso y dejo de pensar. Sigo corriendo…… Joder, ya no puedo más, que manera de sudar más anormal, si no paro y descanso me va a dar algo. Sigo corriendo…… se me está nublado la vista. Me aprieta el pecho como si tuviera encima una plancha de acero gigantesca, ¡ ¡que dolor joder ! siento que me voy a desmayar, todo me da vueltas. Me caigo al suelo.
Ya no siento dolor. Me siento extraño. ¿ estaré muerto ?
Hola amigo. – Me dicen -
¿ que es esto? ¿ donde estoy? ¿ quién eres tú ?
Soy, digamos para que lo entiendas, tu Angel de la guarda.
Por lo tanto, estoy muerto.
Hombre, yo no diría tanto. Lo primero que debes tener en cuenta, es que sepas que todo cuanto te está ocurriendo es absolutamente cierto y real. Que ya no estás en tu mundo. Te encuentras en un estado intermedio. Es donde decidimos si tu cuerpo y tu alma desaparecen definitivamente. Como dirían los cristianos de tu mundo, te encuentras en el purgatorio.
Lo segundo que debes tener en cuenta, es que, el que estés aquí es un error, es decir, no te tocaba morir.
La cuestión es que estoy aquí. Y sabes que pienso, que no hace ni cinco minutos que he dejado mi mundo y ya lo echo de menos. Echo de menos, la luz del día, ¿ aquí siempre hay tan poca luz?, echo de menos el aire, los arboles, el sol ¡ es verdad, hay sol en mi mundo ! Te digo esto porque, de un tiempo a esta parte lo había olvidado. Echo de menos los reproches de Gregorio ¡ joder ! cuanta razón tenía en cuanto a lo de la coherencia.
¿sabes? A veces pienso que me hice de izquierdas porque estaba de moda cuando tenía 18 años y ciertamente, conforme ha pasado el tiempo me he convertido no solo en un conservador sino también en un hipócrita. Digo lo que no hago.
Y, echo de menos a Angela, cuanta razón tenía también. Sabes, la tenía olvidada por completo. Te juro que siempre la he amado pero, no sé que me ha pasado estos últimos meses. Ahora me doy cuenta de que estaba tan absorto en mis obsesiones interiores que no era consciente de que el problema era yo y no los demás. En fin, como ves, no me encontraba en mi mejor momento. Tenía un “cacao” mental tan grande que no era capaz de darme cuenta de todo lo que estaba perdiendo. Sin embargo ahora ya es tarde. Como casi siempre me pasa, ya es tarde para arreglarlo.
No. No es tarde. – me dice - Como te he dicho antes, a ti no te tocaba morir. Ha sido un error, por lo tanto, vas a tener la oportunidad de volver a tu mundo. Ahora eso sí, intenta aplicarte todo de cuanto te has dado cuenta aquí, confía en los que consideras buenos amigos, no te arrepientas de lo anterior pues, si insistes en el arrepentimiento, no lograrás sacar los demonios de la cabeza ni las serpientes del estómago. Simplemente rectifica y solo intenta cambiar aquello con lo que no te sientes cómodo y sobre todo ama a tu mujer si es que realmente siempre la has amado………. Ahora vete. Vuelve a tu mundo y recuerda todo lo hablado.
Estoy tumbado en el suelo. Abro los ojos. Veo el cielo, ¡ veo el cielo ! ¡ hay cielo! Y nubes y arboles y pájaros y aire y sol. ¡ Angela ! quiero ver a Angela. Tengo que decirle lo mucho que la quiero, necesito decírselo. En cualquier caso, no corro, regreso andando. Más que nada, por si acaso. Dos oportunidades como esta es difícil que se presenten.
Llego a casa. La llamo. ¿ Angela?. No responde. Entro al baño y, ahí está, en la bañera, quieta, como dormida. Me acerco ¿Angela? En ese momento comprendo su silencio.
Siento como si tuviera una nube entre mis ojos y mis cejas, que me impide ver, pensar, reaccionar ante una situación que no acabo de asimilar. Es, como cuando en ocasiones me quedo mirando fijamente en un punto mientras reflexiono sobre algo y no veo aunque veo y por más que lo intento no puedo o no me apetece salir de ese estado en el que me encuentro más cómodo.
Siempre tuvo más valor que yo, pero, nunca pensé ...
El cuerpo está totalmente sumergido excepto la cabeza Su nuca apoyada sobre un extremo con una toalla debajo como para morir más cómoda. Sus brazos a ambos lados de su cuerpo y sus manos, sus manos no se ven. A la altura de sus muñecas, dos grandes manchas de un color casi negro en su parte más central y rojizo granate en la zona donde se juntan tapándole el abdomen y haciendo una elipse casi perfecta. Siempre había oído que esa forma de suicidio permitía morir de una manera dulce, sin dolor, como en un estado de sueño . Y así lo parecía.
Sigo sin poder asimilar. Por momentos pienso en la situación que me acababa de ocurrir a mí con aquel extraño personaje. Por momentos vuelvo a mirar el cuerpo de Angela. Por momentos Gregori, el partido, el móvil. No sé lo que me está ocurriendo. No entiendo nada. Me siento abrumado, perdido, culpable. No me pregunto porqué lo ha hecho. Simplemente llego tarde, como siempre.
Rompo a llorar. Noto una pena como jamás la había sentido. Pena de Angela, por haberla llevado a esta situación, por no poder decirle lo que hacía tanto tiempo no le decía, Te quiero. Pena por mí, pues, aun estando vivo me sentía un desgraciado y más muerto que ella.
Ricard despierta. ¿Ricard? Pero, ¿no te das cuenta de la hora que es? Olvídate del footing hoy. Son casi las ocho.
¡ Joder ! ha sido un sueño, un [censurado] sueño. ¡ Dios ! menos mal. Que mal lo he llegado a pasar.
Ricardo ¿te ocurre algo? ¿ porqué me miras con esa cara?
Angela.
Que, Ricardo.
Te quiero.
Sigo corriendo ....... Joder, joder, joder, que paranoia me he montado en un momento. Que si me da un soponcio, que si medio me muero pero no me muero, que si hay un tío raro que me salva y me da otra oportunidad, que Angela se suicida. Sigo corriendo ...... Voy a tener que cambiar a otro deporte que me permita más concentración. Sigo corriendo ...... Tenis, squash, cualquiera de esos estaría bien y además los haría en un horario menos deprimente y acompañado. Sigo corriendo ...... Ahora me siento verdaderamente cansado. Sigo corriendo ...... Claro, con tanto darle al coco, hasta he recorrido algunos kilómetros de más. Sigo corriendo ...... Tengo un sudor frío. Me aprieta el pecho. Se me nubla la vista. Me muero.
Noticia aparecida en el diario “El independiente de Catalunya”
El popular senador Ricard Cincasas del partido PCA ha sido hallado esta mañana muerto en el garaje de su propia casa. En principio se apuntó la idea de un atentado terrorista, pero finalmente, después del levantamiento del cadáver todo apunta al suicidio. Según fuentes de la policía autonómica, cuando su esposa encontró el cuerpo, Ricard Cincasas estaba dentro de su vehículo con el motor en marcha, conectando una manguera de riego desde el tubo de escape e introducida dentro del habitáculo del coche por la una de las ventanillas. Los gases hicieron el resto.
Según informan los médicos forenses, esta forma de suicidio, permite una muerte sin sufrimiento en la que el sujeto va entrando como en una especie de sueño delirante al principio y que, en no más de diez minutos el individuo muere.
Este dramático final, parece tener relación con el estado emocional que,
- según sus allegados - estaba atravesando el senador. Una grave depresión.
Desde estas líneas, queremos añadirnos al dolor de su familia y enviar nuestro más sentido pésame al que en un tiempo, fue columnista de este, su periódico.
rosco. / serotonina